La oposición pide a Torra más diálogo y menos gestos

Los grupos exigen al president que concrete propuestas de consenso para el conflicto

La palabra diálogo se ha convertido en uno de los términos más repetidos desde que Quim Torra accediera a la presidencia de la Generalitat y ayer volvió a escucharse una y otra vez en la sesión de control al Govern que se celebró en el Parlament. Una palabra que, sin embargo, los grupos de la oposición ven vacía de significado en boca del president hasta que éste ponga hilo a la aguja y concrete cómo quiere ejercer ese diálogo y qué propone para solucionar el conflicto entre catalanes y con el Gobierno central.

Tanto Cs, como PSC y los comunes coincidieron, con diferentes acentos, en que además de entablar una negociación con Pedro Sánchez el Govern está en la obligación de rehacer consensos y revertir la división interna que se ha generado en Catalunya desde el inicio de la apuesta independentista.

“Está hablando mucho de la relación entre el Govern de la Generalitat y el de España, pero casi nada del esfuerzo que hemos de hacer internamente”, le reprochó a Torra el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, que le insistió también sobre si está dispuesto a emprender iniciativas institucionales que reconstruyan el consenso interno. “¿Podemos llegar a acuerdos que sumen dos tercios de esta Cámara? Ese es el gran reto”, siguió el líder de los socialistas catalanes.

La necesidad de representar a toda Catalunya fue expuesta también por el líder de Catalunya en Comú Podem, Xavier Domènech: “sólo podrá hablar de tú a tú con el Estado si habla con la voz de todos los catalanes, y no sólo con la del Govern o la de la mayoría parlamentaria”. Domènech instó al president a afrontar de una vez por todas cómo desbloquear la crisis territorial y aparcar los “episodios simbólicos” en los que el Govern persiste, señaló, pero que no ayudan a avanzar ni a encontrar soluciones. Más dura en el tono y en el fondo, como ya es habitual, se mostró la jefa de la oposición, Inés Arrimadas, que acusó al president de hacer un doble juego al hablar de tender puentes. “¿Cómo piensa trabajar para revertir la fractura social que tenemos en nuestra tierra?”, continúo la líder de Cs.

El president les contestó que sí, que está dispuesto a hablar, pero que su propuesta es la defensa del “derecho de autodeterminación” de Catalunya, y que ésto mismo expondrá a Sánchez en su futuro encuentro.

Alternativas, sin embargo, no faltaron ayer en el Parlament. Domènech propuso la creación de una plataforma que agrupe a todos los partidos y la sociedad civil para encontrar soluciones integradoras, y se puso manos a la obra ayer mismo, con un almuerzo discreto con Iceta para acercar posiciones. El primer secretario del PSC, por su parte, reivindicó la apuesta de su partido:

LA RELACIÓN PSC-COMUNES Iceta y Domènech acercan posiciones en un almuerzo discreto

una reforma combinada de la Constitución y el Estatut que se someta a un referéndum; mientras Arrimadas pidió la celebración de un pleno específico “para recuperar la convivencia”.

Iniciativas que Torra valoró –él mismo añadió la propuesta del Cercle d’Economia–. No obstante aseguró que el Govern no renuncia a alcanzar la independencia y volvió a reivindicar el referéndum del 1-O como una votación vinculante que obliga a su ejecutivo a trabajar por una república catalana.