Xiaomi hará en julio la mayor salida a bolsa a escala mundial en dos años
El gigante tecnológico chino Xiaomi anunció ayer que el próximo 9 de julio realizará su salto al parquet de Hong Kong con el que espera recaudar 6.100 millones de dólares, casi 4.000 millones menos de lo previsto, pero que la convierten en el mayor estreno en bolsa de los últimos dos años a escala mundial. Lei Jun, cofundador y consejero delegado, presentó los detalles de la colocación en los mercados de 2.200 millones de acciones con la vista puesta “en el futuro” y el “gran potencial de crecimiento” del grupo.
La cúpula de Xiaomi, formada por ocho fundadores, explicó que se prevé vender las acciones a inversores globales por un precio que oscilará entre los 2,20 y los 2,80 dólares por acción. “Somos una empresa muy rara que puede hacer hardware, comercio electrónico e internet”, defendió Jun tras hacer una exhaustiva presentación sobre la meteórica trayectoria de la firma que el 2017 se convirtió en el quinto proveedor de teléfonos móviles del mundo.
La compañía planea usar parte de lo que recaude en la operación para ampliar sus áreas de investigación y desarrollo y su expansión global, con presencia ahora en 74 países, y en beneficiar directamente a sus fundadores, ya que se espera que Lei ingrese en su cuenta 1.500 millones en acciones. “Llegamos a un consenso para tomar esta decisión debido a la devoción de Lei en los últimos ocho años, que arrancó la empresa desde cero; esta es una práctica común empleada por otras empresas y nosotros hemos hecho lo mismo”, dijo el presidente y cofundador de Xiaomi, Lin Bin.
Con la fabricación de telefonía móvil como su negocio principal, Xiaomi ha diversificado su estructura en ocho años hacia otros productos como ordenadores, robots, electrodomésticos o servicios de internet y comercio electrónico. En el 2017 se convirtió en el quinto mayor fabricante de telefonía del mundo y llegó a exportar más de 92 millones de dispositivos, que le permitieron situarse a la cabeza en mercados como China o India y escalar hasta la cuarta posición en Europa. Convertida en el 2014 en la empresa emergente más valiosa del mundo, tuvo que hacer frente a un receso económico en el 2016 que corrigió en el 2017 con la apertura de tiendas físicas por todo el mundo que le ayudaron a aumentar sus ingresos un 67,5% hasta 18.000 millones y triplicar sus beneficios hasta 1.900 millones en el 2017. Durante el primer cuatrimestre del 2018, su ritmo de crecimiento aumentó un 89,5 %.