UN PASEO POR LA PREHISTORIA
Descubre el arte rupestre y sumérgete en la historia en Lascaux. Las nuevas tecnologías permiten una completa inmersión en cuevas y yacimientos arqueológicos, en un auténtico viaje en el tiempo.
Lo último en tecnología para conocer mejor la prehistoria. Eso es lo que encontraremos en el Centro Internacional del Arte Parietal Montignac-Lascaux, que ofrece al visitante unas instalaciones de más de 8.500 m2 que incluyen una réplica completa e inédita de la cueva original de Lascaux, así como seis salas de exposición que presentan la historia del descubrimiento. Ya solo el edificio que acoge el museo es un auténtico espectáculo. De aspecto sobrio pero del que emana fuerza, se trata de un celebrado proyecto del estudio de arquitectura noruego Snøhetta, mientras que el montaje de las exposiciones ha corrido a cargo del estudio de diseño Casson Mann de Londres. Todo preparado y listo para poder vivir una experiencia insólita y personalizada en el corazón de la Prehistoria gracias a la tecnología.
Al principio de la exposición, el personal del centro nos proveerá de unos “compañeros de viaje” digitales y adaptados a distintas edades. Una vez equipado, y en compañía de un mediador, se accede a un mirador que domina el valle del Vézère, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. A través de una pantalla inmersiva podemos descubrir cómo era el valle hace 20.000 años, cuando se asentaron los primeros habitantes de la zona. Luego daremos un gran salto en el tiempo para trasladarnos a 1940, y acompañar así a un grupo de cuatro adolescentes que, adentrándose en el bosque, descubren los yacimientos arqueológicos.
COMO UNA AUTÉNTICA CUEVA
En este insólito recinto podemos también adentrarnos en una perfecta réplica de la cueva original, reproducida con las técnicas y experiencia del Taller de Facsímiles del Périgord. El ambiente es como el de la auténtica cueva: hace fresco, está oscuro y los sonidos parecen ahogarse en las rocas.
El centro nos permite sumergirnos en la historia a través de distintos dispositivos escenográficos como la maqueta, la creación artística y una muestra de los objetos encontrados en Lascaux. Todos aportan una inmersión en profundidad en el arte de las cavernas y en las técnicas desarrolladas por nuestros antecesores. Así, a partir de una serie de pequeñas salas y organizado en tres actos, este espacio muestra los trabajos de los prehistoriadores del siglo XIX hasta la actualidad.
Aunque una de las experiencias más valoradas por los visitantes es la experiencia en 3D, donde, mediante una proyección en una pantalla múltiple y en relieve podemos sumergirnos en el filme Lascaux y el mundo. Esta película nos traslada a la cueva original, donde descubriremos hasta su último rincón. Se trata de una experiencia llena de realismo y que transmite además un mensaje positivo sobre la humanidad.
Para finalizar la visita, nos adentramos en una sala dedicada de manera exclusiva al arte ruspestre, que se plantea aquí como el origen mismo de toda la creación artística del hombre. A través de una escenografía que simula una cueva con 90 pantallas, veremos la relación del arte primitivo con obras de artistas modernos y contemporáneos como Miró, Picasso o Tàpies, en una exposición insólita.
EL PARQUE DEL THOT
Este parque permite infinidad de aventuras y nuevos conocimientos, puesto que reúne en un mismo lugar un zoo, módulos con talleres sobre la Prehistoria y un espacio museográfico que proyecta una película en 3D sobre la climatología así como una animación en realidad aumentada sobre las especies prehistóricas desaparecidas. Es una forma amena de interesar a niños (¡y mayores!) por la relación entre el ser humano y los animales a lo largo de la historia. Aprovecharemos nuestra visita para conocer mejor al hombre de Cromañón, nuestro antepasado cazador y pintor de animales. Las diferentes animaciones proporcionan las claves para comprender el arte rupestre, pero también otras técnicas del hombre primitivo, como el trabajo del cuero.
Además conoceremos a tres “cachorros” llegados hace poco más de un año al parque. En 2017, tres lobos (Taïga, Cheyenne y Django) se instalaron en el Parque del Thot en un espacio que reproduce su medio natural. Los lobos estaban presentes durante la Prehistoria, como muestran las paredes de la cueva de Font-de-Gaume que datan del periodo Magdaleniense. Una propuesta tan lúdica como pedagógica para saber más de nuestra historia y el entorno.
www.parc-thot.fr
LOS REFUGIOS PREHISTÓRICOS DE LAUGERIE BASSE
Los refugios de Laugerie Basse, declarados Patrimonio Mundial de la UNESCO, son una verdadera referencia en el mundo para los estudiosos de la Prehistoria. El yacimiento está formado por dos refugios: el denominado “clásico”, excavado completamente, y el de Marseilles, del que solo se ha explorado una parte. Este yacimiento destaca por la cantidad (más de 600 piezas) y diversidad de obras de arte que se han descubierto. Las visitas se realizan con una tableta que aporta un enfoque pedagógico y lúdico, mientras una exposición permanente de réplicas de objetos prehistóricos y un filme en 3D enriquecen la experiencia.
www.abris-laugerie-basse.fr