A Croacia le vale con nueve suplentes para hacer pleno

Zlatko Dalic no se lo pensó y, aunque no tenía plenamente garantizada la primera plaza del grupo, priorizó los octavos de final por encima de todo. Reservó a la gran parte de su once titular, incluso al portero Subasic. Sólo repetían Modric y Perisic. La verdad, tampoco necesitó más. A Croacia le bastó con nueve suplentes para ganar a Islandia y hacer pleno de triunfos.

El carrusel de rotaciones balcánico se notó en la primera parte. También que los islandeses tenían un punto más de motivación para apurar sus opciones de clasificarse.

Por eso las mejores oportunidades de esos 45 minutos fueron de Islandia. Sobre todo un disparo de Finnbogasson que salió rozando el poste, tocando el lateral de la red. Más tarde Bjarnasson a punto estuvo de cazar una pelota muerta en el área. Y en pleno acoso y derribo el capitán Gunnarsson hizo lucirse a Lovre Kalinic para cerrar el primer tiempo.

El descanso le sentó bien a Croacia, que regresó al campo dispuesta a competir. Amenazó Badelj al larguero y a la segunda sí que acertó el mediocentro del Fiorentina a batir a Halldorsson.

Con ese resultado, Islandia necesitaba dos goles para quedar por encima de Argentina pero cuando Nigeria igualó requería de tres tantos. Sin embargo, los orgullosos vikingos nunca bajaron los brazos. Además, coincidió con que Croacia le daba un poco de descanso a Modric. El gigante Ingason remató de cabeza al larguero y a renglón seguido Mateu Lahoz decretó penalti por unas manos de Lovren dentro del área. Esta vez Gylfi Sigurdsson no falló. Faltaba un último arreón islandés para aferrarse a su primer Mundial pero Dalic lo atajó dando entrada a Rakitic y con el gol de Perisic, el único titular que jugó todo el partido.