Almacenar 40.000 títulos en braille en la palma de la mano
Un volumen en braille de Harry Potter puede pesar seis kilos y tener una altura de medio metro. Con BraiBook, cualquier persona puede disponer de 4.000 títulos y leerlos en braille gracias a un dispositivo que cabe en la palma de la mano. Esta es la solución que ha creado una joven start-up de Terrassa, que quedó en el tercer puesto en la final internacional de Chivas Venture 2018, celebrada en Ámsterdam, pero que se metió al público en el bolsillo.
¿Cómo funciona?
Los libros en braille tienen diferentes problemas, como su peso y volumen, por ejemplo, un Harry Potter pesa seis kilos y tiene una altura de medio metro. Otro problema es que hay pocos libros que se traduzcan al braille, solo el 5%, tampoco documentos personales o científicos. Además, el tiempo de espera para que un título se pase a braille es de uno o dos años de media. Y un último inconveniente es el precio. Un Harry Potter en braille en EE UU cuesta 150 dólares. Detectamos esta problemática y decidimos buscar una solución.
Todo empezó en un bus.
Hace cuatro años, Carlos Manolell, el actual CEO, estaba sentado en un autocar durante un viaje de unas cuatro horas y a su lado tenía a una persona ciega. Para pasar el rato él leía en su libro electrónico, pero se preguntó qué estaría haciendo su compañero de viaje y por qué no era posible crear un sistema para que pudiera leer en braille de una forma cómoda. Todo el equipo somos personas muy relacionadas con el emprendimiento y no nos costó empezar a trabajar para buscar una solución. Pensamos que para resolver los tres problemas de los libros en braille debíamos trabajar con documentos digitales, y por este motivo creamos un conversor de textos en ePub, pdf y txt al braille. El sistema es muy fácil, funciona como un USB, solo tenemos que introducir el archivo digital y el software lo hace todo, no hacen falta programas especiales. La memoria tiene cabida para 4.000 libros y actualmente trabajamos en castellano e inglés, pero en los próximos meses tendremos otros idiomas como el alemán y el francés.
También es una herramienta de aprendizaje.
Un alto porcentaje de la población ciega no sabe leer braille. El dispositivo también convierte el texto en audio de manera que podemos introducir un documento que sea un abecedario y seguirlo con el sistema braille y a través del audio. Lo mismo podemos hacer con palabras sencillas, frases, e ir evolucionando. De hecho, lo estamos desarrollando porque queremos que BraiBook sea útil no solo para los lectores más hábiles sino también para quienes quieran aprender. Además, es muy fácil de usar, con un solo botón controlamos la velocidad de la lectura, el desplazamiento por el texto…. El dispositivo cuesta 395 euros y con la compra de dos Harry Potters en braille ya estaría amortizado. .
¿Dónde está implantado BraiBook?
A través de la página web podemos venderlo a todo el mundo pero ya tenemos los primeros distribuidores en Latinoamérica y en los próximos meses abriremos mercado en EE UU y Reino Unido. La expansión la hacemos por lenguas, más adelante haremos el salto a Alemania, Francia…
¿En qué momento de desarrollo está vuestro proyecto?
Empezamos a industrializar la producción porque la demanda ha crecido y necesitamos ser más ágiles. Lo hacemos a través de una empresa catalana.
¿Y en el futuro inmediato?
Estamos trabajando para que BraiBook sea, además de un producto, un servicio. La nueva versión tendrá bluetooth y wi-fi, y queremos abrir una plataforma dentro de BraiBook para la venta de libros, con acceso a cursos en braille o para aprender idiomas también en braille. Somos una empresa pero queremos tener impacto social. Hay escuelas y bibliotecas que nos contactan porque tienen personas invidentes y necesitan una solución como la nuestra. A través de nuestra fundación, abrimos una línea para que nos cuenten su necesidades, analizamos qué escuela puede tener mayor impacto y buscamos empresas interesadas en subvencionar este dispositivo.
¿Habéis hecho alguna ronda de inversión?
Sí, una primera de capital semilla para desarrollar el prototipo. Ahora ya estamos en la segunda de 350.000 euros, de los que tenemos entorno al 70%.
¿Qué ha significado para vosotros ganar el Chivas Venture 2018?
A nivel mediático es un premio que tiene mucha repercusión, nos han entrevistado muchos medios de todo el mundo. Nos dieron 150.000 dólares, la mitad de la segunda ronda, lo que nos permite empezar a industrializar. A nivel de equipo ha sido un orgullo por el trabajo hecho y una recompensa.
"Queremos abrir una plataforma dentro de BraiBook para la venta de libros, con acceso a cursos en braille o para aprender idiomas. Somos una empresa pero queremos tener impacto social".