Torra quiere plantear a Sánchez pactar un referéndum en Catalunya
El presidente del Gobierno central pide al independentismo que deje la vía unilateral
El president Quim Torra sostuvo ayer que en la reunión de la próxima semana con el presidente del Gobierno planteará la posibilidad de pactar un referéndum para Catalunya. Sánchez pidió que se renuncie a la unilateralidad y se asuman errores.
Ya a menos de dos semanas de la primera reunión en la Moncloa entre Pedro Sánchez y Quim Torra, que tantas expectativas despierta, los dos presidentes siguen mandándose mensajes desde la distancia. El presidente del Gobierno, con su reiterada oferta de “mano tendida”, “diálogo sincero” y asunción de errores propios y ajenos para empezar a “restañar las heridas”, según afirmó ayer en el Congreso. Y el presidente de la Generalitat, con su advertencia desde Washington de que está dispuesto a hablar “de todo”, pero que “lo primero” que le pedirá será un referéndum de independencia pactado para que Catalunya decida su futuro igual que hicieron Escocia o Quebec, porque “merecemos el mismo trato que ellos”.
Torra ve la reunión con Sánchez del próximo día 9 como “una gran oportunidad para el diálogo y la negociación con el Estado español”. “¡Por fin se nos sienta alguien a la mesa!”, celebró, aunque este tipo de reuniones, avisó, no tendrán “demasiado sentido” si no se aborda “el tema”: el derecho a la autodeterminación de Catalunya y la celebración de un referéndum de independencia pactado. “El Estado debe pensar que, como en Escocia, en un referéndum pactado puede pasar todo. Pueden ganar los independentistas o no. Es un debate que debemos tener y que llevaremos a la reunión con Sánchez”, adelantó Torra desde Washington, donde hoy inaugurará un festival folklórico que tiene a Catalunya como cultura invitada.
“Tenemos una necesidad urgente de escuchar cuál es la posición del PSOE y de Sánchez”, saber si es el partido “que en 1974 defendía el derecho a la autodeterminación de los pueblos de España” o el que “votó con el PP el 155 y no quiere moverse, lo que sería una pésima noticia para nosotros”. Torra se niega a aceptar el acercamiento de los políticos presos como baza negociadora porque “no es que deberían estar más cerca de casa, es que deberían estar en casa”.
Si la oferta de diálogo no se produce y si el derecho a la autodeterminación de Catalunya no se reconoce “de una forma u otra, nosotros seguiremos”. El marco de la actual legislatura, recordó, “es muy claro”: avanzar desde la restitución de las instituciones a la redacción de una Constitución catalana que deberá ser refrendada en las urnas, pero “sin plazos”, porque “no conviene añadir más dificultades”. “La gente no se merece que le vendamos ilusiones falsas”, pero el pueblo catalán “es lo suficientemente adulto para entender que estamos en un momento de gran complejidad”.
Desde el otro lado del Atlántico, en Madrid, Pedro Sánchez, empeñado en impulsar una operación de distensión con Catalunya, aprovechó ayer sus intervenciones en el Congreso para intentar rebajar la inquietud que causaron sus declaraciones en Berlín, instando a “pasar la página” del 1-O. Así, primero quiso aclarar la interpretación de sus palabras en respuesta al portavoz de ERC, Joan Tardà, que le acusó de “dinamitar” toda posible vía de diálogo al querer echar tierra sobre un asunto que fue tan doloroso para muchos catalanes. “A lo que hay que pasar página es a la unilateralidad”, precisó el presidente. Y recordó que él mismo, como líder del PSOE, compareció en Ferraz en aquella funesta jornada para “condenar” unas imágenes dantescas que ya daban la vuelta al mundo.
“Todos hemos de aprender de los errores”, admitió Sánchez. “También ustedes –añadió mirando a la bancada de ERC–, que el 6 y el 7 de septiembre cometieron un error, y a eso también hay que pasar página”. El presidente del Gobierno aseguró
LOS DESEOS DEL PRESIDENTE “Ojalá podamos emprender un camino que restañe las heridas”, confía Sánchez
LOS ANHELOS DEL PRESIDENT “¡Por fin se nos sienta alguien a la mesa!; es la oportunidad para el diálogo”, celebra Torra
UNA JORNADA FUNESTA
Sánchez recuerda que él fue el primero en criticar lo ocurrido el 1-O
SIN PLAZOS, SIN PRISAS
“La gente no se merece que le vendamos ilusiones falsas”, asume Torra
que el referéndum independentista del 1-O fue consecuencia de los hechos de aquellos días de septiembre, cuando “una mayoría parlamentaria representante de una minoría social impuso sus reglas y quebró unilateralmente la Constitución y el Estatut”. “Por eso, cuando hablo de pasar página, hablo de acabar con la vía unilateral”, zanjó.
Ya en la sesión de control al Gobierno, y también en nombre de ERC, fue Gabriel Rufián quien le lanzó una dura advertencia a Sánchez: “Si cree que con buenas palabras, con palmaditas en la espalda en los pasillos, con llamadas, cenas, comidas o con promesas de cargos, nos vamos a olvidar de los nueve secuestrados en Estremera, Alcalá Meco y Soto del Real, le recomiendo que cambie de asesores”. Pero Sánchez insistió en rechazar todo choque, y hasta recordó el entendimiento que existió entre el PSOE y ERC en épocas pasadas. “Las cosas han cambiado –respondió a Rufián–, y ya no tienen enfrente un gobierno que vaya a utilizar el agravio territorial para arañar ningún voto”. “En consecuencia –reiteró–, tendemos la mano para el diálogo abierto, sincero y directo que se necesita entre el Gobierno de España y el Govern de la Generalitat, del que forman parte”. Sánchez confió, en todo caso, en que su próxima cita con Torra inaugure una nueva etapa de distensión: “Ojalá a partir del próximo 9 de julio podamos emprender un camino que restañe las heridas que se han producido en los últimos años como consecuencia de la falta criterio del anterior gobierno, que ha causado la fractura social que existe ahora mismo en Catalunya. Por nosotros no será”.