La economía mantiene su fuerza pese a que flojea el consumo
El Banco de España estima que el PIB sigue al alza a un ritmo del 0,7% hasta junio
Entre abril y junio, la economía española mantuvo el mismo ritmo de crecimiento de los tres trimestres anteriores, al avanzar al 0,7%. Sin embargo, según los cálculos del Banco de España, al final de este segundo trimestre se ha producido “un cierto debilitamiento” del consumo por la pérdida de poder adquisitivo. El bolsillo de las familias, señalan, se está resintiendo con la subida de los precios. La inflación repunta por el encarecimiento de los carburantes –en mayo, el IPC escaló hasta el 2,1%–, mientras que los salarios “siguen mostrando” tasas de crecimiento “reducidas”.
En todo caso, el organismo supervisor destaca que este mantenimiento del “dinamismo” de la actividad económica en España se desmarca de la desaceleración experimentada en la zona euro. El informe recuerda que en el arranque del año el PIB en la eurozona creció un 0,4%, tres décimas menos que a lo largo de los trimestres del año pasado, y que ya hace un par de semanas el Banco Central Europeo decidió revisar a la baja –tres décimas menos, hasta el 2,1%– el crecimiento previsto para este año. Los analistas del Banco de España vinculan parte de esta desaceleración a los “efectos desfasados” en el comercio exterior de la apreciación del euro durante el año pasado y, en general, ql mal comportamiento de las exportaciones.
El consumo, reseña el informe del organismo que dirige Pablo Hernández de Cos, continúa siendo el pilar del crecimiento de la actividad en España. El gasto de los hogares se cimenta en el aumento de las rentas gracias a “la mejora sostenida del empleo”. La creación de puestos de trabajo avanza, pero lo hace a menor ritmo. Los cálculos del Banco de España reflejan que la tasa interanual en el segundo trimestre del año fue del 2,3%, una cifra que se aleja del 3% registrado en buena parte de los dos últimos años.
El supervisor explica que sus proyecciones para el 2019 y el 2020, publicadas hace diez días y que prevén una subida del PIB del 2,4% y el 2,1% respectivamente, marcan una reducción paulatina en el ritmo de crecimiento debido a “el alza reciente del precio del petróleo, una contención gradual de los ritmos esperados de avance de los mercados exteriores y un cierto atemperamiento del impulso expansivo procedente de la
La economía española está sorteando la desaceleración del conjunto de la zona euro, destaca el informe
política monetaria”. En el ámbito doméstico, el Banco de España vuelve a mostrar su preocupación por las políticas económicas que se acaben adoptando en estos próximos dos años, dado el fraccionamiento en el Parlamento y las dificultades que comporta conformar mayorías para poder sacar adelante iniciativas legislativas.
A escala mundial, el informe indica “fuentes de incertidumbre” de los últimos meses, como una escalada en la guerra arancelaria promovida por Donald Trump, la apreciación del dólar por la normalización de la política monetaria de Estados Unidos o cómo la tensión política en Italia pone en cuestión la solidez de la UE.