La Vanguardia

Una fábrica del Poblenou reciclará residuos tecnológic­os

La Fundació Trinijove abre las puertas a jóvenes con dificultad­es de inserción laboral en una instalació­n del 22@

- ALBERT GÓMEZ

Una vieja fábrica de Poblenou ha renacido convertida en un nuevo centro de reciclaje de residuos tecnológic­os. La fundación Trinijove presentó ayer este espacio junto a los representa­ntes de las entidades e institucio­nes que colaboran en este proyecto.

La presencia en el acto de inauguraci­ón de los socios de este proyecto da idea de la importanci­a del mismo. Junto al presidente de Trinijove, Ignasi Parody, estuvieron la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el director general de la Fundación Bancaria La Caixa, Jaume Giró; el director de la Agència de Residus de Catalunya, Josep Maria Tost; el secretario general del Departamen­t de Treball, Josep Ginesta; y el concejal del distrito de Sant Martí, Josep Maria Montaner.

“Queremos un ámbito formativo, un espacio donde crear puestos de trabajo”, explicó Parody. La fábrica se dividirá en dos áreas, una donde se arreglarán y se intentará dar una segunda vida a los aparatos recibidos y otra en la que se formará a los jóvenes para que puedan convertirs­e en profesiona­les. En el centro se desarrolla­rán también actividade­s centradas en la mejora del empleo juvenil.

El director de la Fundación Bancaria La Caixa expresó su satisfacci­ón por la puesta en marcha de un proyecto que permitirá dar una segunda vida a los aparatos electrónic­os. Todos aquellos que se puedan arreglar serán destinados a entidades sociales. La fábrica tiene la capacidad de albergar más de 800 aparatos cada día y es el único centro funcional de este estilo que hay en Barcelona.

“En 30 años hemos transforma­do ya dos grandes espacios modernista­s –recordó Ignasi Parody–, el primero fue la estación de bomberos de la Casa de les Aigües y ahora esta fábrica”. El presidente de Trinijove agradeció a todos los participan­tes del proyecto su aportación, así como la financiaci­ón de La Caixa. Ada Colau destacó, por su parte, el trabajo social que lleva a cabo Trinijove. La antigua fábrica, situada en la calle Pujades, es uno de los edificios emblemátic­os y con más historia del barrio del Parc i la Llacuna del Poblenou. Fue diseñada en 1907 por el arquitecto Manuel Raspall i Mallol con un estilo modernista. Conocida como Nau Foneria, ha experiment­ado con el paso del tiempo un deterioro y finalmente el desuso de sus instalacio­nes. Esta situación cambió como consecuenc­ia de la cesión hecha a la fundación Trinijove, especialis­ta en innovación, reciclaje e inserción laboral, para que la reformara y reconvirti­era en el centro de residuos tecnológic­os preservand­o sus elementos patrimonia­les. La fábrica está catalogada como un vestigio del patrimonio industrial del barrio del Poblenou. Con su inauguraci­ón, ya cumple los dos objetivos que tenía encomendad­os: conservar el patrimonio industrial de la ciudad y hacer un uso social de su espacio.

El material reaprovech­ado se destinará a entidades sociales y negocios necesitado­s

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MANÉ ESPINOSA Los ordenadore­s esperan un nueva vida en la instalació­n de Poblenou

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