‘Connery’ Puigcorbé
El fichaje estrella de ERC en las pasadas elecciones municipales de Barcelona ha acabado estrellado por obra y gracia de su propia escudería. Joan Josep (antes Juanjo) Puigcorbé ha sido víctima de uno de los métodos clásicos de la vieja política: la de los dossieres. El líder republicano en el Ayuntamiento barcelonés, Alfred Bosch, dijo de Puigcorbé, cuando lo presentó en el 2015, que era el Sean Connery de su candidatura –Connery es un actor que se hizo famoso por sus magníficas interpretaciones como James Bond–. Pues bien, en cierto sentido ERC ha utilizado mecanismos similares a los filmes del conocido espía británico para deshacerse de su particular agente secreto, aunque han olvidado que 007 no solamente tenía licencia para matar, sino que siempre salía airoso de todos los envites por mortales que fueran.
En este episodio, el envite es un informe interno encargado para saber qué ambiente laboral hay entre los funcionarios y trabajadores de la Diputación de Barcelona. El informe dice que algunos de estos empleados públicos consideran a Puigcorbé como un jefe borde. No lo expresa con esta palabra, pero se podría resumir así. Para que sirva de contexto, hay que recordar que la relación de Sean Connery Puigcorbé con su jefe de filas Alfred M Bosch (M es como llamaban a la jefa de James Bond) es pésima casi desde el primer día en que ambos entraron en el Consistorio. Se desconoce
El intento del MI5 de matar a su propio agente 007 es una peligrosa estrategia que se puede volver en contra
si este vínculo personal está relacionado o no, pero el informe se utilizó como arma para matar políticamente a Bond. A principios de junio, agentes del MI5, unidad del espionaje británico a la que pertenecía M y James Bond, le fueron a ver, le enseñaron las conclusiones del informe donde le ponían a parir y le indicaron que debía dimitir. Puigcorbé aceptó y anunció su dimisión por motivos personales. Pero alguien del MI5 decidió burdamente filtrar el informe y ese error llevó a 007 a realizar una de sus típicas escenas de escapismo. Fue a recoger su pasaporte (el acta de concejal) y optó por volar solo como edil no adscrito, aunque esto haya supuesto su expulsión de ERC. Bond Puigcorbé asegura que pronto se sabrá toda la verdad. Mientras, el nuevo presidente de la Diputación, Marc Castells, que no es del MI5 sino de la CIA (léase PDECat), ha anunciado una investigación interna para determinar quién y por qué ha filtrado un informe interno, confidencial e inacabado. O sea, que la CIA investigará si hay un topo del MI5.
Los espectadores esperamos si al final se descubre una conspiración del maléfico Doctor No para eliminar a 007. Es decir, veremos si el informe que considera a Puigcorbé un maltratador de funcionarios es una obra de ficción o si Connery acaba siendo el malo de la película. Sigan atentos a sus pantallas para ver el final de esta representación porque, nuevamente, la política y la interpretación se mezclan en esta historia que todavía no ha acabado y que puede tener repercusiones muy reales en las expectativas electorales de ERC en el Ayuntamiento si no la administran mejor de lo que han hecho hasta ahora.