La Vanguardia

Rakitic mete a Croacia en cuartos

El blaugrana anota el penalti decisivo en una tanda protagoniz­ada por los porteros

- CARLOS NOVO Madrid

En un auténtico duelo de parapenalt­is Croacia eliminó en la tanda de penas máximas a una rocosa Dinamarca, que llegó viva a la misma porque Schmeichel le detuvo un penalti a Modric en el minuto 114, a sólo seis del final de la prórroga. En la tanda, los dos porteros fueron los protagonis­tas. Scheimeche­l paró otros dos, pero Subasic se constituyó en el gran héroe, al parar tres de los daneses. Croacia disputará el próximo sábado en Sochi el cuarto de final que parecía destinado a España, pero su rival será Rusia.

La victoria de Croacia llegó con enorme sufrimient­o y poco juego. El equipo de Dalic estuvo desconocid­o. Había sido de los que mejor imagen había dado en la fase de grupos pero ayer casi nada le salió bien y estuvo en un tris de seguir la senda de los favoritos que han hecho las maletas.

Dinamarca, mejor puesta, entendió mucho mejor lo que le convenía y supo aplicar con celo su plan que consistía en desconecta­r a las estrellas croatas, Modric y Rakitic, con muy poco peso en el partido. El azulgrana no encontró cómo mover a los suyos y Modric, que jugó más adelantado que en el Madrid, no pudo asistir a los delanteros y sólo empleó con cuentagota­s el lanzamient­o desde fuera del área.

Dos goles tempranero­s parecieron anunciar un partido mucho más entretenid­o y vistoso del que fue. Los dos tantos no fueron producto del buen juego, sino hijos de jugadas embarullad­as en el área. Dinamarca marcó en el minuto uno en una acción confusa, un balón rebotado que cazó Jorgensen y lo alojó en la red tras dar en Subasic.

Dinamarca no pudo disfrutar apenas nada de la ventaja. A los cuatro minutos empató Croacia en otra jugada aún si cabe un poco más chusca. Rebic tocó para Vrsaljko y el lateral del Atlético centró al corazón del área, despejó Christense­n, pero el balón impactó en la cara de un compañero y le cayó muerto a Mandzukic, sin marca, que definió bien ante el portero danés.

El empate fue digerido enseguida por la seleccion de Age Hareide, que no se descompuso. Siguió a lo suyo. A diferencia de otros equipos, el danés no practica un cerrojazo puro y duro. Busca siempre la salida limpia de balón por parte de Eriksen, que además ser quien más calidad tiene es el que más corre. Y arriba el delantero Poulsen se mueve bien entre líneas, es veloz y un peligro constante.

Croacia no encontró el ritmo de juego. Dalic puso a Brozovic para acompañar a Rakitic y Modric, pero

EL ERROR A seis minutos del final de la prórroga, Modric tuvo el triunfo en su mano pero malogró una pena máxima

los croatas no encontraro­n nunca la inspiració­n. El partido fue intenso, pero jugado lejos de las áreas.

La segunda parte no cambió el panorama. Croacia tenía más el balón, pero Dinamarca asomaba con cierto peligro. En los treinta minutos extra de la prórroga Dinamarca pareçió más entera pero tampoco sacó provecho. En el minuto 114 llegó la jugada que pudo ser clave: un gran pase de Modric a Rebic y el derribo de Jorgensen a este. Modric tiró fatal el penalti y se llegó a la tanda con la moral danesa por las nubes. En la misma Ivan Rakitic marcó el gol decisivo. Croacia ya tiene sus cuartos de final.

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JASON CAIRNDUFF / REUTERS Rakitic marcó el penalti decisivo que clasificó a Croacia

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