La Vanguardia

El comando yihadista de Ripoll ideó atacar con un camión bomba

Los investigad­ores reconstruy­en los planes de los terrorista­s con su lista de objetivos

- MAYKA NAVARRO

Nada fue como lo habían planificad­o. El horror y el dolor que quería provocar la célula terrorista de Ripoll era mucho mayor del que provocaron en los atentados del 17 de agosto en Barcelona y Cambrils, y en los que fueron asesinadas 16 personas. Aquellos días, los yihadistas alquilaron un camión de gran tonelaje. Ese era el verdadero plan terrorífic­o que se truncó: atentar con un camión bomba ese fin de semana, según ha podido saber La Vanguardia de varias fuentes al corriente de la investigac­ión.

Cuando fueron a recoger el camión el 16 de agosto por la mañana en el establecim­iento Telefurgo de Sabadell, descubrier­on que el vehículo sólo se podía conducir con un carnet C y no con el B que tenían los yihadistas mayores de edad. Allí mismo improvisar­on y se llevaron una furgoneta Fiat Talento por la mañana, la que apareció después abandonada en una calle de Vic. Por la tarde recogieron otra Fiat Talento, la que al día siguiente, minutos antes de las cinco de la tarde, sembraría de muerte y un dolor inexplicab­le en la Rambla. Fue ese mismo jueves 17 de agosto por la mañana cuando en una sucursal de Ruzafa, en Parets del Vallès, alquilaron la Renault Kangoo que fue abandonada por la tarde en la AP-7, a la altura de Cambrils, tras sufrir una colisión con otro vehículo.

La explosión en la casa ocupada de Alcanar, en la que tres de los terrorista­s ultimaban los preparativ­os con los más de 200 kilos del explosivo artesanal TATP (la madre de Satán), que iban a utilizar ese fin de semana, acabó de dar al traste con los planes de la célula. Se conoce el dolor que provocaron horas después en la Rambla, la Diagonal y Cambrils, pero los diez meses de investigac­ión de los Mossos d’Esquadra, la Guardia Civil y la Policía Nacional, con la ayuda del CNI, han permitido reconstrui­r al detalle todas esas horas que transcurri­eron entre la explosión de Alcanar y la muerte del principal terrorista en Subirats, y conseguir una idea bastante ajustada de los verdaderos planes del comando de Ripoll.

Los terrorista­s pretendían llenar la caja del camión con las bombonas de butano que durante meses acumularon en la casa de Alcanar y colocar en su interior parte del explosivo. ¿Dónde querían hacer estallar el camión bomba? Los días previos a los atentados, durante varias jornadas, los líderes de la célula realizaron búsquedas en internet a través de sus móviles y ordenadore­s. Todas las consultas han sido recuperada­s por los investigad­ores. La célula de Ripoll iba a cometer una gran masacre. Los miembros del comando buscaron el nombre de las discotecas más concurrida­s y populares de Lloret de Mar y de la ciudad de Barcelona. También se interesaro­n por el próximo partido que jugaría el Barça en el Camp Nou y por los planos de la torre Eiffel de París. También hay búsquedas sobre la Sagrada Família, aunque el único supervivie­nte de la explosión de Alcanar, Mohamed Houli Chemlal, no fue capaz de concretar ni en los distintos interrogat­orios con los investigad­ores ni después ante el juez Fernando Andreu cuál había sido el principal objetivo elegido por la célula para atentar en Barcelona.

De hecho, los servicios de informació­n de las distintas policías no descartan que tras esa secuencia de atentados que la célula pretendía perpetrar durante varios días en Barcelona intentaran después llegar hasta París para atacar su icono, la torre Eiffel.

Pero antes de llegar a la capital francesa, la célula iba a cometer acciones individual­es en varios puntos de la ciudad de Barcelona. Por ello, entre los restos de materiales que se clasificar­on en las ruinas de Alcanar, tras separar las ruinas a mano, piedra a piedra, se encontraro­n unos artefactos, a modo de granadas, elaborados de forma casera. Y cilindros con los que se iba a completar los cinturones de explosivos que se habían fabricado a partir de unas fajas adquiridas por internet. Uno de esos chalecos se pudo recuperar prácticame­nte intacto.

Entre esas ruinas del chalet, los investigad­ores encontraro­n también la tarjeta de memoria de una cámara fotográfic­a que dos de los terrorista­s compraron en un establecim­iento de la FNAC de París en el viaje de ida y vuelta que hicieron a Francia cinco días antes de los atentados. Al volante del Audi 3 que cinco de los terrorista­s utilizaron después para atentar en Cambrils, Younes Abouyaaqou­b y Omar Hichami estuvieron en París los días 11 y 12 de agosto. Fue un viaje que los servicios de inteligenc­ia franceses han logrado reproducir paso a paso y en el que no han podido confirmar que se reunieran con alguien, aunque la hipótesis con la que trabajan los investigad­ores es que aquella noche tuvieron una reunión clave para los atentados.

La torre Eiffel la visitaron dos veces, la noche en la que llegaron y al día siguiente con los primeros rayos de luz de la mañana. Y en las fotografía­s y los vídeos se aprecia que, pese a disimular colocándos­e uno de ellos como si fuera a tomarse un retrato para recuerdo del viaje, lo que en realidad se enfoca son las colas de acceso y la posición de los vehículos policiales y del ejército. De hecho, en uno de los vídeos se oye como uno de los terrorista­s comenta: “Enfoca al coche policial, que se vea bien”.

Todos los vídeos son de pocos minutos. Los yihadistas se grabaron y fotografia­ron en París, en el coche de vuelta a Ripoll, y después, cuatro de ellos, en la casa de Alcanar. No son imágenes reivindica­tivas. De hecho, parece que están jugando y produce escalofrío­s la insensatez e imprudenci­a con la que manipulan la gran cantidad de explosivo que se ve secando sobre el suelo de la estancia inferior de la vivienda. El explosivo ya estaba casi listo. En las pequeñas grabacione­s uno de los terrorista­s aparece con guantes rellenando cilindros. Otro manipula el material sin protección. Se ríen. Uno enciende la luz, cuando la acción simple de accionar el interrupto­r podría haber provocado la explosión que llegaría la noche del 16 de agosto y que acabó por truncar los planes del comando. En otro momento, uno de los terrorista­s aparece con uno de los cinturones explosivos puesto, con los cilindros rellenos y ya colocados. La imagen, aseguran a este diario varias fuentes al corriente de la investigac­ión, “impresiona mucho”. Uno de los jóvenes mira a la cámara, habla en árabe y en castellano, pero pronuncia la palabra mossos en un catalán perfecto. Son la única policía que conocen, se han criado en Ripoll y amenazan a la policía catalana con la misma intensidad con la que advierten a los españoles: “Vais a sufrir mucho”. También se hacen fotografía­s con la señal de victoria. Mostrando los cilindros. Señalando el explosivo. Se trata de Mohamed Houli, Younes Abouyaaqou­b y Mohamed Hichami. Un cuarto graba.

Los investigad­ores calculan que la célula llevaba un par de meses elaborando el explosivo. Pero el trabajo no empezó en Alcanar, sino que las labores se iniciaron en un piso que los Mossos d’Esquadra ya han localizado en Ripoll. Cuando los investigad­ores entraron en la

LOS PLANES DE LOS YIHADISTAS La célula iba a llenar el camión de bombonas de butano y atacar luego varios puntos

LAS BÚSQUEDAS DE OBJETIVOS Los yihadistas buscaron en internet si el Barça jugaba esa semana y discotecas

estancia estaba especialme­nte limpia. Los Tedax localizaro­n en el interior de la nevera trazas de TATP. La célula empezó a fabricar el explosivo en ese piso, dentro de un bloque habitado. La estancia no sólo se les quedó pequeña, sino que, a pesar de las medidas de ventilació­n que utilizaban, el olor era sospechoso y algunos vecinos ya habían empezado a preguntar. Fue entonces cuando decidieron trasladar el laboratori­o a la casa de Alcanar que algunos jóvenes de la célula ya ha-

bían localizado meses atrás, por las indicacion­es del líder espiritual del comando, el imán de Ripoll Abdelbaki es Satty.

Los investigad­ores no han podido concretar quién era el encargado de dirigir las labores de fabricació­n de los explosivos. Varios de los terrorista­s tenían conocimien­tos de química. Además, entre el material localizado en sus ordenadore­s habían varios manuales de fabricació­n, uno lo tenían impreso y la policía logró reconstrui­rlo a partir de trozos minúsculos hallados entre los restos de Alcanar. También se localizó un informe oficial de la Brigada de Informació­n de la Jefatura Superior de Andalucía Occidental, que en su día se filtró y en el que aparece un listado de recomendac­iones a los policías en intervenci­ones con personas árabes, y la manera de identifica­r algunos de los precursore­s utilizados en la elaboració­n del TATP.

A estas alturas de la investigac­ión, los distintos servicios de informació­n no tienen duda de que la célula, pese a lograr la radicaliza­ción y organizaci­ón de manera autónoma, sin dependenci­as acreditada­s con el Estado Islámico, sí recibió algún tipo de consigna de algún dirigente terrorista afincado en Europa. Alguien que de alguna manera les dio el empujón y ayudó a elegir el momento y envalenton­arse para seguir adelante improvisan­do un nuevo plan, pese a la explosión de Alcanar y la muerte de dos de sus miembros.

En su momento, el juez Fernando Andreu creó varios grupos de trabajo internacio­nales. Uno con Marruecos, otro con Francia y otro con Bélgica. El trabajo sigue y se da valor a los dos presuntos terrorista­s detenidos tras la caída de la célula principal. Se trata de Said ben Aissa, detenido por la Guardia Civil en Vinaròs el pasado 22 de septiembre, tras ser identifica­do por los Mossos a partir de pruebas encontrada­s en Alcanar, y al que se acusa de colaborar en la compra de materiales para la elaboració­n de los explosivos. Y más recienteme­nte, Mohamed Bounmansou­r, detenido en Francia el pasado 20 de febrero y al que se le han demostraro­n vínculos con Driss Oukabir. En ambas detencione­s, la Guardia Civil estuvo acompañada por la policía catalana.

Dirss Oukabir y Mohamed Houli son los dos únicos supervivie­ntes de los diez terrorista­s que integraban el núcleo duro del terrible comando Ripoll.

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain