Las mujeres son más de la mitad de los jueces y magistrados en Catalunya
Más de la mitad de los 810 jueces y magistrados activos en Catalunya son mujeres, en concreto el 56,3% del total. Así se detalla en la última memoria anual del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSCJ), que recoge los datos de finales del 2017. El informe, además de trazar una radiografía del ámbito de la justicia en Catalunya, plantea unas serie de conclusiones con un tono reivindicativo, como la reclamación de un aumento de personal –una demanda que viene repitiéndose año tras año– y una mayor formación judicial.
El documento del TSJC señala que la plantilla de jueces y magistrados en Catalunya en el 2017 estaba conformada por 456 mujeres y 354 hombres. En el informe se destaca, asimismo, el aumento de los procedimientos judiciales, que cifra en un 5,74% y que se aproxima ya al listón de los 900.000 anuales. El año pasado se registraron en los juzgados catalanes 54 litigios por cada mil habitantes.
Según la memoria del TSJC, la justicia resolvió en Catalunya un 97,1% de los asuntos presentados en el 2017, aunque el informe advierte de que el incremento del volumen de casos “impidió realizar el compromiso de dar una respuesta judicial de calidad y en tiempo razonable” debido a “problemas estructurales y de gestión”. De hecho, la memoria subraya que hubo un 41,54% de plazas servidas por personal auxiliar interino, 2.986 sobre un total de 7.189, lo que supuso un ligero descenso respecto al año anterior, en el que fue del 42,5%. No obstante, según la memoria, este elevado grado de interinidad generó “una situación de cambios continuos de personal que perturbó sobremanera el normal funcionamiento del órgano”. Por este motivo, la memoria considera imprescindible ampliar la planta judicial, crear nuevos órganos judiciales y mejorar la formación de todo el personal.
La memoria también analiza los usos lingüísticos en el ámbito de la justicia. Destaca que sólo un 8,2% de las sentencias fueron redactadas en catalán, esto es, 18.346 sobre 224.220, por lo que el informe sugiere “potenciar las acciones formativas y de mentalización de los profesionales” y que se generen herramientas de traducción de documentos redactados en castellano.
La feminización de la justicia, que con todo tiene todavía un techo de cristal en lo que se refiere al acceso de las mujeres a los escalafones más altos, es significativa no sólo entre los jueces y magistrados, sino también en el sector de los fiscales y los secretarios, mientras que los hombres son clara mayoría entre los notarios, procuradores y registradores.