Aniversario
Dos mil seiscientos caracteres. Este es el espacio máximo que este gran medio me brinda semanalmente para haceros cómplices de mi día a día y acercaros mis periplos por el mundo de la moda. Sin embargo, el ritmo frenético de algunos de mis días más huracanados necesitaría al menos tres artículos para poder detallaros todo lo que me gustaría; aun así, siempre haré lo posible para que mis ojos sean vuestro escaparate más extenso a todas mis experiencias vividas.
El martes, París me esperaba de nuevo. A pesar de considerar la capital francesa como un segundo hogar, es inevitable que el bullicio de Charles de Gaulle me haga sentir vulnerabilidad y seguridad a partes iguales. Mi gran amigo Stephan Rolland aguardaba con impaciencia mi llegada para vivir una nueva Alta Costura a su lado. Un genio único cuya generosidad volvió a arroparme al hacerme partícipe de su talento y ser una de sus elegidas para disfrutar sobre la pasarela sus trajes arquitectónicos, empoderarme con prendas de carácter y llorar con los primeros acordes de la música. Una amistad pura, basada en la admiración mutua y en una madurez profesional que hemos construido con el tiempo.
El maratón comenzaba; el desfile de Elie Saab fue el aperitivo de dos jornadas arrolladoras. La sensualidad y la apacibilidad de sus tejidos me dejaron sumida en un estado de estupefacción así como la voz de Luz Casal, cuya personalidad casó a la perfección con la feminidad y la elegancia inherentes a la firma. Acto seguido, el hotel George V tenía todo preparado para festejar el éxito y el cumpleaños de Elie.
La noche siguiente, me adentré en el Caviar Kaspia, un restaurante que se convierte en la fortificación de todos los diseñadores y el universo celebrity durante la Semana de la Moda. Valentino, Zuhair Murad o Alessandra Ambrossio fueron algunos de los rostros convocados en un mismo espacio. Mi estancia en París finalizó precisamente en el desfile del maestro Valentino, cuyas creaciones fueron una oda a la belleza perfecta, aquella que con sólo mirar atraviesa el alma.
Esa misma tarde aterrizaba en un Madrid caluroso para enfrentarme a un nuevo reto; retransmitir en directo el inicio
Me enfrentaba a un nuevo reto: retransmitir en directo el inicio de la Fashion Week para ‘Flash Moda’, que cumplía seis años
de la Mercedes Benz Fashion Week para Flash Moda, el programa que dirige Jesús María Montes-Fernández. Mi nerviosismo se acentuó ya que ese mismo día cumplíamos seis años de emisión. Una celebración ansiada y merecida por el triunfo de un camino de esfuerzo y satisfacción. Mi corazón iba desacompasado con la cuenta atrás de la regidora; tres, dos, uno y… el foco rojo de la cámara ya me miraba fijamente para comenzar.
Seis años de pasión y sacrificio de un equipo unido en el apoyo y la visibilidad de la industria de la moda y la marca España.