Hora de mover a Queipo
La Junta andaluza y la Hermandad de la Macarena coinciden en actuar para retirar de la basílica los restos del general
Los restos del franquista Queipo de Llano serán retirados de su ubicación actual, en la basílica de la Macarena.
La posibilidad de que los restos del general franquista Gonzalo Queipo de Llano abandonen la basílica de la Macarena, donde actualmente se encuentran a la vista del público, parece cada día más cercana. La Junta de Andalucía ha tomado finalmente cartas en un asunto en el que ha mirado para otro lado durante años. La propia Hermandad de la Macarena también parece dispuesta a una solución, hasta ahora pospuesta una y otra vez, conocedora de que la aplicación de la ley de Memoria Histórica de Andalucía les obliga.
La urgencia con la que Pedro Sánchez quiere exhumar los restos de Franco del Valle de los Caídos obliga a moverse a una Susana Díaz hasta ahora muy prudente en este tema. Se ha necesitado un impulso político llegado desde fuera para que el Gobierno andaluz reaccione a una situación difícil, que hiere todas las sensibilidades, la de quienes defienden que se retiren los restos de “un genocida” de un inmueble religioso, y la de quienes aseguran que se trata de un recinto privado y de una decisión que corresponde a los herederos del general y a los hermanos macarenos.
Casi setenta años después de su muerte, la figura de Queipo de Llano sigue siendo muy controvertida en Sevilla. Para la mayor parte de historiadores y expertos, se trató del principal artífice del triunfo del golpe fascista en Andalucía occidental y el máximo responsable de las matanzas franquistas en Andalucía. Un personaje que sembró de terror el sur de España, donde se contabilizan 708 tumbas ilegales con unos 45.700 asesinados.
Para sus descendientes y los afines ideológicos al franquismo fue quien “salvó a Sevilla” de “caer bajo el dominio rojo”. Para los cofrades más jóvenes y los cortos de memoria fue el gobernador que impulsó el desarrollo de la provincia y el Hermano Mayor de honor que levantó con su dinero la basílica de la Macarena, exactamente en el mismo sitio donde en 1936 se ubicaba la taberna anarquista más conocida de la ciudad, borrada a cañonazos de la faz de la tierra.
Por la enorme relevancia de la Macarena en Sevilla (13.600 hermanos) y por la sensibilidad que despierta la polémica entre los cofrades, Díaz ha abordado siempre este asunto con extrema prudencia. Por eso, sorprendió el comunicado que la Junta emitió el lunes, en el que anunció que se creaba un comité de expertos con la misión de emitir un informe, que será “vinculante”, para decidir qué se hace con las tumbas de Queipo de Llano y de su esposa, Genoveva Martí.
“La presencia de los restos de Queipo de Llano ha generado un debate social que trasciende ya el ámbito local. En ese contexto, resulta clara la pertinencia de que una institución con cuatro siglos de historia y arraigo en la ciudad, como es la Hermandad de la Macarena, titular de la basílica, decida sobre la compatibilidad de la permanencia en un espacio de culto, de respeto y oración de un dirigente del golpe militar y de la dictadura franquista, que firmó el bando de guerra por el que se asesinaron a miles de andaluces y andaluzas sin juicio ni condena, lo que atenta contra la dignidad de las víctimas y la reparación que reclaman, tanto las propias víctimas como el movimiento memorialista”, señala la nota de la Junta.
Aún permanecen en los archivos de la cadena Ser las alocuciones de Queipo a través de Radio Sevilla en las que incitaba a la violación y el asesinato con frases como la siguiente: “Esto está totalmente justificado porque estas comunistas y anarquistas predican el amor libre. Ahora por lo menos sabrán lo que son hombres y no milicianos maricones. No se van a librar por mucho que berreen y pataleen”.
Casi al mismo tiempo que el comunicado, el hermano mayor de la Macarena, José Antonio Fernández Cabrero, apuntaba la solución de que los restos fueran trasladados a un columbario que se va a crear en el interior de la basílica para que allí reposen los restos de los hermanos que lo deseen. “Podría ser una solución,
La decisión de Sánchez sobre el dictador fuerza a moverse a Díaz, hasta ahora muy prudente en una cuestión polémica
pero ahora mismo no es la solución y no sabemos si el tema va a durar días o décadas”, añadía.
En todo caso, Junta y Hermandad niegan veracidad a las informaciones sobre la existencia ya de un acuerdo. Juan Carlos Blanco, portavoz de la Junta de Andalucía, reiteró que la solución “pasa por el comité técnico”, y Fernández Cabrero recordó que “aún se tiene que pronunciar la junta de gobierno de la Hermandad y alcanzar un acuerdo con la familia”.