Castigo más severo por el uso del móvil mientras se conduce
Pere Navarro, el nuevo director general de Tráfico, va desvelando poco a poco sus intenciones para reducir la siniestralidad en la carretera una vez recuperado ese sillón que ya ocupó entre el 2004 y el 2011. Desde la DGT se confirma la decidida voluntad de Navarro de actualizar el carnet por puntos, que él mismo implantó hace doce años.
La información sobre esa reforma se está dando en cuentagotas, pero parece estar ya decida la propuesta, indican las mismas fuentes, de castigar con mayor severidad (más pérdida de puntos) el uso de teléfonos móviles mientras se conduce o la reincidencia en la ingesta de alcohol y consumo de drogas al volante.
En lo que afecta al teléfono móvil, Pere Navarro afirmó ayer en una entrevista concedida a Radio Nacional de España (RNE) que esa tecnología ha avanzado mucho en los últimos doce años, por lo que considera que ha llegado el momento de adaptar las sanciones a los nuevos hábitos de los conductores.
El WhatsApp no existía, por ejemplo, cuando se implantó el carnet por puntos y ahora esa aplicación, sostiene Navarro, está detrás de buena parte de los accidentes causados por distracciones. Así que el uso de esos aparatos tecnológicos podría ser sancionado en un futuro con más de los tres puntos que ahora se retiran.
El director de la DGT ha anunciado, por otro lado, que intentará implicar a las compañías de telefonía en esta nueva cruzada para reducir la siniestralidad. Su propuesta pasa por dotar a los teléfonos de un “modo coche” igual que existe el “modo avión”. Esa tecnología impediría usar aplicaciones que requieren tocar el aparato mientras se conduce. El teléfono sólo podría usarse, mediante el bluetooth, para llamadas de voz. Algunas marcas de automóviles ya contemplan esa tecnología que bloquea aplicaciones de mensajes cuando el teléfono detecta el movimiento del coche y sólo permite el uso del “manos libres” para llamadas.
El anuncio de Pere Navarro coincidió con la publicación ayer de un informe del Centro de Estudios Ponle Freno-AXA que revela que entre el trece y el dieciséis por ciento de los conductores confiesan que leen y envían mensajes mientras conducen o hablan por el teléfono sin utilizar el dispositivo “sin manos”.
Otra de las intenciones de Navarro es reducir a noventa kilómetros o menos la velocidad en las carreteras convencionales, que son las que ahora más accidentes mortales concentran. El estudio de Ponle Freno-AXA revela, en este apartado, que el 43% de conductores de entre 18 y 24 años considera que la velocidad excesiva no es una conducta “muy peligrosa”.
El director de la DGT propone aplicar una tecnología que bloquee los canales de mensajes en el coche