Ryanair y Fomento discrepan sobre las indemnizaciones por la huelga
En España se han anulado 400 vuelos que afectan a 75.000 personas
Un verano más con problemas en los aeropuertos españoles. La compañía irlandesa anunció anteayer la cancelación de unos 600 vuelos (400 de ellos con origen o destino en España) por la huelga de tripulantes de cabina de pasajeros, que afectará a unos 75.000 pasajeros. La aerolínea rechazó sin embargo desvelar la cifra de vuelos que se verán afectados en El Prat.
Para tratar de minimizar el impacto, la compañía asegura que ha reubicado a la mitad de los pasajeros en otros vuelos de días anteriores y posteriores a los paros para resolver lo mejor posible la situación, según explicó el director general de marketing, Kenny Jacobs, a Efe.
No obstante, estas prisas por reubicar pasajeros responden también a que Ryanair trata de reducir los pagos que tendrá que efectuar para compensar la cancelación de sus vuelos. Su postura choca frontalmente con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), que depende del Ministerio de Fomento.
AESA informó ayer de que Ryanair está obligada a pagar compensaciones a cada pasajero por la cancelación de su vuelo, que oscilan entre un mínimo de 250 euros y hasta un tope de 600 euros. Estas indemnizaciones serán de 250 euros para vuelos de hasta 1.500 kilómetros; de 400 euros para los enlaces intracomunitarios de más de 1.500 kilómetros; y para todos los demás viajes de entre 1.500 y 3.500 kilómetros, de 600 euros, según la normativa europea. Según este organismo español, “la compensación es obligada, ya que la aerolínea no ha avisado de las cancelaciones con al menos 15 días de anticipo”.
Sin embargo, la compañía explica que “todos los pasajeros afectados ya han sido contactados vía email o mensaje de texto y han sido informados de sus opciones: reembolso completo o reubicación gratuita en el próximo vuelo disponible”. A lo que añade: “La compensación EU261 no se aplica en los casos de cancelación de vuelos por huelgas de sindicatos, ya que se trata de circunstancias extraordinarias que están completamente fuera del control de Ryanair”.
AESA argumenta que “la huelga está convocada por los tripulantes de cabina de pasajeros, que es personal de la propia compañía, y por lo tanto, las cancelaciones no se deben a una circunstancia extraordinaria, lo que obliga a Ryanair a abonar las compensaciones”.
A menos de una semana de la huelga, el directivo no cree que el paro pueda desconvocarse, por lo que Ryanair ha decidido cancelar con tiempo suficiente los vuelos que no operarán durante esos días, para “dar la máxima oportunidad a sus clientes de poder ser reubicados en otros”. Y en última instancia, para minimizar el pago de indemnizaciones por la avalancha de reclamaciones que pueden llegar.
En su opinión, si la aerolínea hubiera esperado hasta la semana que viene para ver si se suspendía la protesta y se hubiera puesto a partir de ese momento a informar a los clientes de las cancelaciones, “seguramente los pasajeros tendrían menos opciones para poder ser acomodados en otros vuelos”.
En cualquier caso, las asociaciones de consumidores también han empezado a advertir a los pasajeros afectados de sus derechos por las cancelaciones.
En este sentido, Ryanair alega que ha anunciado las cancelaciones con más de siete días de antelación, con lo que podría verse eximida de esta compensación si ofrece un transporte alternativo que les permita a sus clientes afectados salir con no más de dos horas de antelación con respecto a la hora de salida prevista. Para aplicar esta eximente también debe garantizar que los pasajeros lleguen a su destino final con menos de cuatro horas de retraso con respecto a la hora de llegada prevista. Y no puede pedir al pasajero que adelante el coste de dicho transporte.
El portavoz de Facua, Rubén Sánchez, recuerda que los afectados pueden reclamar otro tipo de indemnizaciones por daños y perjuicios, tanto morales como patrimoniales, que pudieran haber padecido.
Por otro lado, el sindicato USO apuntó ayer que denunciará a Ryanair ante Inspección de Trabajo por presionar a los tripulantes de cabina a manifestar su intención esos dos días de huelga. Mientras que la aerolínea justifica que está preguntando a los empleados su intención para ese par de días para conocer con qué efectivos reales va a contar.
En principio, hoy el Ministerio de Fomento, que dirige José Luis Ábalos, fijará los servicios mínimos para las dos jornadas de huelga. Por ahora, desde Fomento no se plantean retirar la licencia para operar a Ryanair.
COMPENSACIÓN
La aerolínea tendrá que pagar de 250 a 600 euros a cada pasajero por las cancelaciones
DISCREPANCIA
AESA dice que la huelga es por empleados de la compañía y no por factores externos