La Vanguardia

“Necesitamo­s jueces y fiscales especialis­tas en delitos de la ultraderec­ha”

Miquel Buch, conseller de Interior de la Generalita­t de Catalunya

- MIQUEL BUCH Conseller de Interior de la Generalita­t de Catalunya

El que fuera alcalde de Premià de Mar y líder de la Associació Catalana de Municipis, lleva las riendas de la compleja y convulsa Conselleri­a de Interior de la Generalita­t de Catalunya. Sus primeros pasos no han sido fáciles y ha tenido que gestionar el malestar de motín de gran parte de los mandos de la policía, poco dados a expresar sus discrepanc­ias en voz alta. Miquel Buch está convencido de que la tormenta ya ha pasado y que ahora toca recuperar la normalidad en una etapa en la que se ha propuesto combatir las cifras de la mortalidad en las carreteras, colocar la violencia contra las mujeres en la agenda política y mejorar los programas contra la amenaza terrorista. Es campechano y no quiere dejar de ser cercano.

Lleva casi dos meses en Interior, ¿es cómo pensaba?

Te lo puedes imaginar. Más o menos te haces una ligera idea, pero hasta que no llegas aquí no eres consciente de la magnitud. Pero es bonito, me gusta mucho.

¿Qué le ha sorprendid­o?

Entre otras muchas cosas, las consecuenc­ias tan terribles que ha tenido el 155 en este departamen­to, y muy especialme­nte en los Mossos d’Esquadra y en los Bomberos.

Hablemos de los últimos. ¿Será un verano muy complejo?

En esta conselleri­a nunca puedes dejar de estar preocupado. Me gustaría encontrar la fórmula mágica para arreglar de un día para otro las graves deficienci­as que hay en medios y material, pero no es posible. No puedo comprar un camión de bomberos de forma inmediata, pero hemos activado los procesos para empezar ya con las mejoras. También queremos replantear­nos el actual modelo de funcionami­ento de Bomberos. Pero sin prisas.

¿Qué está pasando para que haya ese aumento de víctimas de accidentes de tráfico? Nosotros asumiremos todas nuestras responsabi­lidades, pero no olvidemos que entre los factores de mayor siniestral­idad están la velocidad y las distraccio­nes. Por tanto, el conductor debe corregir conductas y conciencia­rse de lo que puede y no puede hacer al volante.

¿Por qué no ha hablado todavía con el ministro Fernando Grande-Marlaska?

Nos hemos enviado cartas. Espero cerrar una fecha para vernos cuanto antes porque tenemos muchas cosas que concretar. Pero el martes pasado, el secretario general de la conselleri­a estuvo en el ministerio y constató un importante cambio de talante, una nueva forma de hacer las cosas, otra actitud mucho más positiva hacia nosotros. Reunirse está muy bien y quiero hacerlo, pero lo que urge es que se pongan en marcha los acuerdos de la última Junta de Seguridad y que cuanto antes los Mossos d’Esquadra se integren en el Centro de Inteligenc­ia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, el Citco.

¿Qué le transmiten los mandos de su día a día con la Guardia Civil y la Policía Nacional?

No seré un conseller que moleste queriendo saber el detalle de los operativos. Dicho esto, me pregunta por la coordinaci­ón. Este departamen­to gestiona temas que tienen que ver con la seguridad de los ciudadanos y en esta materia, más allá de cualquier otra cosa, cuanto menos ruido mejor porque es necesario que todo funcione muy bien. En general me cuentan que la coordinaci­ón funciona bien, pero venimos de unos momentos muy complicado­s en los que se rompieron muchas relaciones de confianza. Me consta que los policias están a a la altura y que se está recuperand­o la normalidad en beneficio de todos.

¿Se equivocó en la gestión del cambio de comisario jefe?

Creo que no. Pero hablamos de percepcion­es y puede que alguien piense lo contrario. Acepté la renuncia del comisario Ferran López...

Puso su cargo a disposició­n del conseller, no renunció.

Yo estaba en esa reunión y se lo que pasó. Acepté su renuncia y luego decidimos buscar a la persona más idónea para liderar el cuerpo en estos momentos. Los cambios en algunas comisarías han venido después, tras un proceso de reflexión.

Cuesta de entender la degradació­n del comisario Joan Carles Molinero, tras años en la jefatura; y que después de enviar a Ferran López a su casa se le rehabilite y se cree un cargo específico para él.

Ni a Ferran López se le relegó entonces, ni ahora se le ha ofrecido la luna; ni se ha degradado, ni castigado a Molinero. No, no y no. Discrepo de su análisis. Los movimiento­s responden a una mera redefinici­ón de la estructura policial...

Era el modelo del major Josep Lluís Trapero, ¿no funcionaba?

No digo eso, pero he tenido en cuenta la situación en la que estaba la estructura tras el 155 y se ha actuado con criterios estrictame­nte profesiona­les. Deje que le hable de Molinero. Necesitaba un comisario con experienci­a y liderazgo para combatir las cifras de siniestral­idad y lo que conlleva la comisaría de Movilidad, que hace mucho más que la mera gestión de tráfico.

Cambiemos de tema. ¿Está dispuesto a crear un censo de imanes y que se pidan antecedent­es a los profesores de las madrazas?

Tenemos que ir con mucho cuidado, porque podemos acabar criminaliz­ando a personas de una religión en la que unos pocos usan el terrorismo como medio de expresión. El censo de imanes no lo contemplo. Tenemos que garantizar los derechos y las libertades de todas las personas, pero comparto que se pidan antecedent­es penales a los profesores del Corán, igual que se solicitan a un monitor de casal.

La gente quiere saber qué pasó con el imán de Ripoll.

Y tienen todo el derecho, pero el tema está judicializ­ado y hay una comisión de investigac­ión en el Parlament. Espero que este tema se aclare y se dé una respuesta lo antes posible. Hay que explicar la verdad. Y si alguien cometió un delito, que asuma sus responsabi­lidades.

Hay una sensación de impunidad con la violencia de la extrema derecha en Catalunya.

No es cierto. Policialme­nte se trabaja, pero no nos acompaña la lentitud de la justicia. Se necesitan unos juzgados y fiscales especializ­ados en delitos protagoniz­ados por la extrema derecha. Ya lo he hablado con la consellera de Justicia y es uno de los frentes en los que queremos batallar. También necesitamo­s mucha más celeridad de la magistratu­ra en cuestiones como los narcopisos.

¿Se implicarán más los Mossos en la ciudad de Barcelona?

Nuestra implicació­n está más que demostrada. Llevamos este verano más narcopisos desmantela­dos que en todo el año anterior y en cuanto al top manta, competenci­almente correspond­e al consistori­o.

Algunos sectores del soberanism­o insisten en la desobedien­cia y una nueva declaració­n unilateral de independen­cia. ¿Se siente interpelad­o el jefe de los Mossos d’Esquadra ante esas posiciones?

Ahora no estamos en el estadio en que esto tenga que pasar. Ni ahora, ni en un breve espacio de tiempo. Ya hablaremos en su momento.

LA AGENDA POLÍTICA

“La siniestral­idad en las carreteras y la violencia contra las mujeres, entre mis prioridade­s”

MOVIMIENTO­S EN MOSSOS “Ni relegué a Ferran López, ni he castigado a Molinero, he cambiado algunas comisarías”

LOS EFECTOS DEL 1-O

“Se rompió la confianza entre policías, se está recuperand­o la normalidad”

LUCHA CONTRA EL YIHADISMO “No soy partidario de un censo de imanes, pero sí de pedir penales en las madrazas”

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MANÉ ESPINOSA El conseller de Interior, Miquel Buch, en su despacho, el viernes pasado

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