El rock latino de Maná invade Cap Roig
La formación mexicana interpretó sus éxitos anoche en el festival ampurdanés
Encarando ya la cuarta semana de programación de su edición de este año, el Festival de Cap Roig convocó anoche a 1.750 espectadores –según indicaron fuentes de la organización del acontecimiento– dispuestos a pasarlo bomba con el cancionero de los mexicanos Maná. La veterana banda fundada en Guadalajara en 1987 aterrizó en Calella de Palafrugell en el marco de una gira por el Estado español que concluirá el día 4 de agosto en Almería. En total son siete los compromisos agendados en la Península, siendo el de Cap Roig el único en tierras catalanas.
En sus 31 años de trayectoria artística, la formación mexicana ha publicado nueve álbumes de estudio con gran repercusión comercial. Han acumulado cuatro premios Grammy y ocho Grammy latinos y ha vendido más de 40 millones de discos, marca de récord donde las haya.
Maná también ha ganado numerosas batallas en terrenos no tangibles, siendo reconocida por la opinión pública y publicada como una banda de referencia en el ámbito del pop-rock latino. El grupo ha tenido asimismo un significativo reconocimiento institucional con la medalla de Oro del Mérito a las Bellas Artes otorgada por el gobierno español en el 2017.
Manda una señal, canción perteneciente a su disco del 2006 Amar es combatir, destapó el repertorio interpretado anoche en el Festival de Cap Roig por el cuarteto que integran Fher Olvera (guitarra y voz), Sergio Vallín (guitarra), Juan Calleros (bajo) y Álex González (batería), reforzado para la ocasión con tres músicos más. El concierto tuvo sesgo antológico, ya que el grupo no saca álbum desde el 2015. Entre los asistentes se encontraban personalidades del mundo económico (Jordi Gual, de CaixaBank), editorial (José Creuheras, del Grupo Planeta), televisivo (Jaume Roures, de MediaPro) y deportivo, con el capitán del Espanyol Javi López y el piloto Marc Gené.
“Bona nit, Catalunya. Esta noche vamos a echar un buen desmadre”, saludó el cantante de
Maná en los primeros pasos de un concierto donde el conjunto también interpretó Oye mi amor, con pelaje funky y ya con la mayoría de los asistentes de pie y entonando la letra de la canción. Le siguieron los tumbaos de Corazón espinado, una pieza escrita por el propio Fher y originalmente grabada por Carlos Santana. Con la sinuosa Déjame entrar ,el bolo entró ya definitivamente en órbita.
La de Santana no fue anoche la única alusión a terceros. La versión del clásico mexicano El rey, de José Alfredo Jiménez, también hizo acto de presencia en el repertorio. Nuestros protagonistas supieron trabar una sesión vigorosa y con gran comunicación entre el escenario y la platea, en la que también hubo lugar para la reivindicación ecologista, así como “deseos de luz y sabiduría para Nicaragua y Venezuela”. Todo ello, junto a grandes éxitos de la trayectoria de Maná como Mariposa traicionera, En el muelle de San Blas o Clavado en un bar, entre otras..
TEMAS CONOCIDOS
El concierto tuvo un sesgo antológico, pues el grupo no saca disco desde el 2015
CONEXIÓN CON EL PÚBLICO
Los asistentes entonaron todos en pie un ‘Oye mi amor’ con pelaje funky
UN ÉXITO TRAS OTRO
Alarde de repertorio, incluido el ‘Corazón espinado’ que Fher escribió para Santana