Nace una fundación para modernizar la imagen del sector del taxi en España
El taxista puede ser el energúmeno que la emprende a golpes contra un vehículo de alquiler con conductor (VTC) con una niña pequeña dentro o esa persona que te lleva allí donde necesitas, con vocación de servicio, haciendo el trayecto agradable y a un precio reglamentado. Entre una imagen y otra hay un abismo, y la huelga de la semana pasada provocó que pesaran más las imágenes negativas que las positivas.
Para tratar de mejorar la maltrecha reputación del sector, en septiembre arrancará una fundación que busca ayudar en la transformación del taxi. Su impulsor, Dionisio Gracia, un veterano del sector y en la actualidad presidente de honor de la Unalt (Unión Nacional de Asociaciones Libres de Autopatronos y Empresarios del Taxi), busca “ayudar a empresarializar con visión de mercado un ecosistema mayoritariamente de autónomos”. Lo quiere hacer impulsando la formación de los trabajadores, introduciendo más innovación, mejorando la comunicación ante la opinión pública y apostando por la responsabilidad social corporativa.
Algunas acciones concretas pasarán por una apuesta decidida por el vehículo eléctrico, nuevas acciones ventajosas para personas con movilidad reducida que se mueven en taxi… También buscarán vías de mejorar la imagen, un aspecto que Gracia considera fundamental para el futuro del sector. “Parece que los otros son la modernidad y el taxista, en cambio, representa una imagen antigua y arcaica, algo que no es justo”, resume Gracia. La mejora de la indumentaria del conductor con uniforme (no necesariamente de traje y corbata) es una de las opciones que algunas compañías andan barajando.
La vía a través de la que se canalizará todo ello será una fundación con el nombre de Fundación del Taxi Sostenible-Siglo XXI. La base operativa se encuentra en Barcelona, pero el objetivo es llegar a los alrededor de 70.000 taxistas que hay en España, cada uno de ellos de su padre y de su madre y con los que es injusto llevar a cabo generalizaciones. Dionisio Gracia está acompañado en esta aventura por Jordi Bosch, director de la oenegé Banco Farmacéutico, y desde hace unas semanas mantiene conversaciones con asociaciones del sector . El impulsor de la nueva iniciativa deja claro que “las asociaciones tradicionales y esta fundación son planos diferentes que deben avanzar juntos y en paralelo”. Ya han mantenido algunas reuniones con asociaciones de taxistas de todo el país y se intensificarán en septiembre, cuando arranque oficialmente la fundación.