Más viviendas de alquiler social
El Institut Català de Finances y la Agència de l’Habitatge crean dos líneas de préstamos de 250 millones de euros y en condiciones preferentes para financiar la construcción y compra de edificios
Las viviendas a construir en municipios de fuerte demanda acreditada tendrán de promedio 70 m2 y un alquiler mensual de 450 euros
La Generalitat destinará 250 millones de euros para ampliar el parque de vivienda de alquiler social de Catalunya. Ciento diez millones de euros son para que ayuntamientos y entidades sin ánimo de lucro y del Tercer Sector puedan comprar viviendas y destinarlas a alquiler social. Por otra parte, 140 millones de euros son para que los promotores puedan construir nuevas viviendas y destinarlas a la misma finalidad. stas dos líneas de actuación aumentarán el parque de alquiler social en 2.800 pisos.
La línea de préstamos para financiar la compra de viviendas, dotada con 110 millones de euros, tiene como destinatarios a ayuntamientos, entidades sin ánimo de lucro, del Tercer Sector y promotores sociales. Se busca que estas entidades puedan adquirir viviendas destinadas a alquiler La Generalitat se plantea como objetivo el incremento del parque de alquiler social y la mejora de las vías de acceso a la vivienda social, lo que permitirá ampliar la oferta de alquiler social en 1.800 viviendas.
Próximamente está previsto que las entidades financieras saquen a la venta una parte importante de su parque de viviendas. La legalidad vigente permite que antes de la venta la Agènica de l'Habitatge de Catalunya (AHC) pueda ejercer su derecho de tanteo y retracto, y adquirirlos para luego ofrecerlos a las entidades del Tercer Sector y los promotores sociales. Estas operaciones, que se hacen a precios individualmente muy ajustados, representan una oportunidad única para incrementar el parque de alquiler social.
El acuerdo marco firmado entre el Institut Català de Finanzes (ICF) y la AHC fija que las entidades que adquieran estas viviendas deberán destinarlas, prioritariamente, a peticiones derivadas de emergencias. En este caso, los inquilinos pagarán sólo 30 euros al mes. Cuando los ingresos estén 1,86 veces por debajo del Indicador de la Renta de Suficiencia (IRSC), la Generalitat subvencionará la diferencia entre los 30 euros de alquiler mensuales y los gastos de devolución del préstamo. Si no se dan casos de este tipo, los promotores podrán destinar las viviendas a alquiler social para otros colectivos con necesidades dentro del municipio.
Esta línea apuesta por la fórmula de la propiedad temporal asociada al préstamo recibido. Es decir, las entidades serán las titulares de los inmuebles durante 75 años, plazo a partir del cual la vivienda entrará a formar parte del parque público de la Generalitat.
MIL NUEVAS VIVIENDAS
El ICF y la AHC también activaron en abril una línea de financiación para la construcción de viviendas de alquiler social dotada con 140 millones de euros para promotores privados y promotores públicos (ayuntamientos, consejos comarcales...). Las viviendas se deberán construir en alguno de los 152 municipios con fuerte demanda acreditada, según el Plan Territorial Sectorial de la Vivienda. Estos préstamos servirán para ampliar el parque público de alquiler social en Catalunya ya que permitirán 1.000 nuevas viviendas, que tendrán una media de 70 m2 y tendrán un precio máximo de 450 euros mensuales.
PRÉSTAMOS PREFERENTES
Para llevar a cabo las dos líneas de préstamos, el ICF aportará los recursos y analizará y gestionará los préstamos, y la AHC emitirá un informe de elegibilidad. Los préstamos contarán con un tipo de interés fijo sobre el que se aplicará una bonificación parcial por parte de la AHC, caso de que sea elegible. El plazo de amortización será de un máximo de 25 años, con posibilidad de un periodo de carencia de hasta dos años inclusive.
Las solicitudes de estos préstamos –ICF Vivienda Social (promoción) y ICF Vivienda Social (adquisición)– se pueden tramitar a través de la plataforma del Institut Català de Finanzes (www.icf.cat).