Los 60 provocadores años de Madonna
La artista estadounidense, que vive en Lisboa, sigue siendo un referente en la música y la moda
Madonna Louise Veronica Ciccone cumple hoy 60 años. Una mujer a la que la acompaña la polémica y provocación prácticamente desde que nació en Bay City. En esta ciudad estadounidense del estado de Michigan, ella es el único personaje ilustre nacido allí (según Wikipedia), aunque a los 19 años viajó a Nuava York (son sólo 35 dólares) para formarse como bailarina en Nueva York. En el 2016, para festejar su 58 aniversario revolucionó La Habana. El pasado año hizo lo mismo en un pueblo de la región italiana de Puglia, donde montó una fiesta gitana. Y para los 60 el lugar escogido ha sido Marrakech donde sus 50 invitados, alojados en un lujoso resort de La Medina de Marrakech (propiedad de Vanessa, la hermana de Richard Branson), disfrutan de tres días de fiestas.
“No pienso en mi edad hasta que alguien lo menciona”, declaró recientemente la cantante en una entrevista. Madonna pertenece a ese genero de estrellas incombustibles que desafían el tiempo como Mick Jagger (75) o Bruce Springsteen (68). Y puede presumir de haber sobrevivido a dos contemporáneos suyos Michael Jackson y Prince, que este año hubieran cumplido también 60. Y es que a diferencia de ellos dos, a Madonna no se la ha relacionado con drogas u otras adicciones.
No obstante sí que se ha visto implicada en numerosos escándalos. Su actitud provocativa en los escenarios, la libertad sexual que siempre ha promovido o la forma en la que ha utilizado la iconografía religiosa le han valido numerosos ataques. La iglesia la ha excomulgado hasta tres veces, por ejemplo, y le han retirado contratos publicitarios, pero ella después de cada escándalo ha sabido reinventarse. Madonna es la diva de la música por excelencia que llena estadios y que ha inspirado a las estrellas actuales. Lady Gaga, Rihanna, Katy Perry, Taylor Swift o Miley Cyrus, son consideradas herederas suyas, y todas han confesado públicamente su admiración por la cantante de éxitos como La isla bonita, Like a pra-
yer, True blue, Vogue, Material girl o Papa don’t preach. Britney Spears y Christina Aguilera podrían incluirse en este grupo de admiradoras. Junto a Madonna en el 2003, protagonizaron uno de los momentos más polémicos de las galas de la MTV cuando las besó apasionadamente. La primera edición de estos premios, en el 1984, arrancó también con polémica, pues una desconocida Madonna, vestida de novia y realizando movimientos sexuales, se presentó con Like a virgin.
Madonna, además de cantante, también ha probado suerte en el cine, donde ha recibido más palos que elogios. En su filmografía hay títulos como Buscando a Susan desesperadamente, Shangai Surprise, Dick Tracy, El cuerpo del delito o Evita
(por la que ganó el Globo de Oro como actriz). En el campo en el que nadie le discute su influencia es en la moda. Desde la estética punk de sus inicios al mítico corsé que diseñó para ella Jean-Gaultier. Por eso ha lanzado varias líneas de moda (la última con su hija mayor) y sido imagen de varias firmas.
Casada dos veces (Sean Penn y Guy Ritchie) es madre de dos hijos biológicos Lourdes Leon (21), nacida de su relación con el cubano Carlos Leon, y Rocco Ritchie (18). Y tiene cuatro adoptados en Malawi, David Banda (13), Mercy James (12) y las gemelas de 5 años Stella y Esther (el nombre de Madonna en la creencia del cabala). La adopción de los cuatro (en el 2006, el 2009 y el 2017, respectivamente) siempre ha estado rodeada de polémica, ya que la han acusado de haberse saltado las leyes. Para paliar las críticas creó la fundación Raising Malawi.
Con su hijo Rocco tuvo problemas hace tres años. El chico quería vivir en Londres con su padre, para huir de la férrea disciplina que al parecer le imponía la cantante. La discusión acabó en los tribunales y la relación entre ambos se suavizó. Actualmente sus seis hijos son la prioridad de Madonna. Por ese motivo hace un año que toda la familia se mudó a Lisboa, ya que David Banda juega al fútbol y lo ha fichado la escuela del Benfica. La cantante vive en un palacete en el casco antiguo, donde hay escasez de plazas de aparcamiento. El Ayuntamiento le ha cedido un terreno con capacidad para 15 vehículos por 750 euros al mes, lo que ha causado malestar a los vecinos por lo que consideran un trato de favor. Está claro que vaya donde vaya y haga lo que haga Madonna suscita polémica.