La Vanguardia

Atlantia se deja un 22% en la bolsa a raíz de la tragedia de Génova

La caída del grupo italiano arrastra a ACS, su socio en Abertis, que cede casi un 2%

- ÓSCAR MUÑOZ

El desplome del puente Morandi de Génova amenaza a Atlantia, el principal grupo de infraestru­cturas europeo, en uno de sus pilares, Autostrade per l’Italia, la sociedad que explota la vía de peaje siniestrad­a. El trágico accidente del martes, que se ha cobrado al menos 38 vidas, va a tener serias repercusio­nes para la firma controlada por la familia Benetton. A la espera de que el Gobierno italiano concrete las medidas que tomará, que pueden ir desde una multa hasta la revocación de la concesión de la autopista A-10 e incluso de todas las gestionada­s por la citada filial, que suman 3.020 kilómetros, los títulos de Atlantia cedieron ayer un 22,26% en la bolsa de Milán, y se situaron en 18,30 euros. Este retroceso arrastró al español ACS, socio del grupo italiano en Abertis, que cayó un 1,97% para quedarse en 34,75 euros.

El martes Atlantia ya sufrió un fuerte revés en la bolsa de la capital lombarda. Al poco de producirse el siniestro, llegó caer más del 10%, lo que obligó a suspender su cotización. Finalmente, cerró la sesión con un retroceso del 5,4%. Pero la cosa no quedó ahí. Tras la jornada festiva en la bolsa italiana del miércoles, el grupo sufrió ayer mucho más en el parquet. El anuncio de las autoridade­s italianas –hablaron, el primer ministro Giuseppe Conte, el miércoles, y el viceprimer ministro Luigi Di Maio, ayer– de que se iba a activar el proceso para revocar la concesión, que vence en el 2038, provocó una avalancha de órdenes de venta, lo que paralizó la cotización durante una hora. El valor de la acción llegó a caer más del 25%.

Después llegaron algunas aclaracion­es. El viceminist­ro de Transporte­s, Edoardo Rixi, precisó que el Ejecutivo tiene otras dos posibles respuestas más suaves encima de la mesa: rescindir la concesión sólo para la A-10 o imponer una multa, si bien apuntó que los 150 millones de euros máximos fijados en el contrato serían insuficien­tes. Estas explicacio­nes frenaron la caída de las acciones a lo largo de la jornada.

ACS se vio arrastrado por la caída de Atlantia. En la apertura de la sesión de ayer perdió más del 5% pero a lo largo de la jornada el impacto se fue atenuando para cerrar con una cesión por debajo del 2%, aunque no evitó ser el valor que más retrocedió del Ibex. El grupo que preside Florentino Pérez, directamen­te y mediante su filial alemana Hochtief, que ayer cayó un 4,79%, controlará la mitad menos un título del cagún pital de la sociedad conjunta, todavía no constituid­a, que será la propietari­a de Abertis, el principal grupo de concesione­s de autopistas de España. La otra mitad más una acción, así como el control, lo tendrá Atlantia.

Por medio de un comunicado, Atlantia lamentó que el Gobierno se propusiera iniciar el proceso de revocación de la concesión “sin una previa argumentac­ión específica y en ausencia de comprobaci­ón de las causas efectivas de lo sucedido”. Se- los términos del contrato, el Estado puede rescindirl­o si existe una violación grave por parte del concesiona­rio. El grupo advirtió que si se llega a este extremo, se le “deberá reconocer el valor residual, con la deducción de las eventuales indemnizac­iones si son aplicables, una vez que se hayan deducido las posibles sanciones”. También recordó que la medida puede “tener impacto para los accionista­s y bonistas de la sociedad” por lo que se deberá “tener en cuenta su protección”. Edizione, la sociedad de cartera de la familia Benetton que tiene el 30% del capital de Atlantia, además de extender condolenci­as a las familias de las víctimas, aseguró que hará “todo lo que esté en sus manos” para “descubrir la verdad y las responsabi­lidades” de lo ocurrido. Fuentes del grupo añadieron que se había hecho el mantenimie­nto que correspond­e y recordaron que hace cuatro años, el M5S, ahora en el gobierno, se opuso a la construcci­ón de una variante.

Los tenedores de bonos de Atlantia pueden ejercer una opción de venta en varios casos, incluyendo cuando la concesión o el contrato de concesión individual se rescinde o cancela de acuerdo con sus términos o por razones de interés público, recordó Bloomberg. Según Reuters, el grupo italiano ha emitido hasta la fecha cinco bonos, con vencimient­o entre el 2021 y el 2029, por un valor total de 3.200 millones de euros en el marco de un programa de 7.000 millones. La filial Autostrade per l’Italia tiene previsto celebrar una junta de emergencia a principios de la próxima semana para evaluar el impacto de la tragedia en sus negocios y responder a los requerimie­ntos del Gobierno.

EL GOBIERNO

Estudia tres medidas: una multa, revocar la concesión de la A-10 o de todas las autopistas

LA CONCESIONA­RIA Recuerda que se deben aclarar las causas y que si hay rescisión se la deberá compensar

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