La top que navega entre el cine y las redes
Un día sí, otro también Emily Ratajkowski se convierte en la gran protagonista de Instagram. Y en verano más que nunca. Exhibiendo un cuerpo espectacular durante sus vacaciones exclusivas (saltando de las playas europeas más lujosas a la arena cálida de Miami) y de paso a su marido, el músico Sebastian Bead-McClard. Pero esta top británica-estadounidense de nombre complicado, va más allá de la simple pose. Deslumbra con una carrera en que se maneja igual de bien como modelo que como actriz de Hollywood, y también con la exposición de sus ideas políticas ante sus 6,5 millones de seguidores.
Así es como se ha convertido en una firme activista del feminismo y también en una belleza capaz de poner por escrito sus experiencias y sentimientos. Sí, todos conocen a Emily Ratajkowski por sus fotos con las pamelas gigantes de Jacquemus y por sus escuetos bikinis de verano, pero también por ser la autora del ensayo El impacto de definir la palabra sexy en sus propios términos que publicó la revista Lenny Letter de Lena Dunham .
EmilyRatajkowski sigue los pasos de su madre, una profesora de inglés a quien describe como una “feminista e intelectual”, y de su padre, que es pintor y maestro del arte. Por eso, ni calla ni quiere callarse. Por eso publica lo que quiere y cuando quiere. Y por eso permanentemente causa revuelos en la red.
Coleccionista de arte, viajera compulsiva y amante de la buena comida y de la fiesta, esta modelo ilustrada inició su carrera a los 14 años, como imagen de las firmas Carl’s Jr., Forever 21, Nordstrom y Frederick’s of Hollywood primero, y como actriz en la serie de televisión iCarly yen Gone girl. Pero fue su trabajo en el vídeo musical Blurred lines de Robin Thicke el que le otorgó el reconocimiento internacional que quiere aprovechar hasta las últimas consecuencias. En el vídeo salía prácticamente desnuda (con un breve tanga de color nude) bailando junto a otras chicas y estrenando la polémica que siempre le ha acompañado.
Y le va bien. Primero consiguió que la revista Esquire la eligiera mujer del año 2013 y que GQ la erigiera en la más sexy del mundo del 2014, tras posar en topless para el retorcido Terry Richardson. Sin ser la más alta de la pasarela (mide 1,70 y pesa 52 kilos) ni la más indicada para triunfar en este momento en que vuelven las modelos con curvas, ha encontrado su camino en las redes pero también en el cine: desde ese lanzamiento suyo de la mano de Robin Thicke no ha parado.
¿Lo más reciente? Forma parte del reparto de Feel pretty (una comedia escrita y dirigida por Abby Kohn y Marc Silverstein que narra la experiencia de una mujer insegura que, tras sufrir un golpe en su cabeza, gana una extrema autoconfianza en su apariencia) y de In darkness, una película de suspenso, dirigida por Anthony Byrne y escrita por Byrne y Natalie Dormer que fue estrenada el 25 de mayo del 2018, por Vertical Entertainment.
Cuenta la historia de Sophia, una pianista ciega, atrapada en el peligroso submundo de Londres después de oír a alguien asesinar a su vecina.
Emily Ratajkowski sabe que ahora que triunfan las curvas no es la top perfecta, pero domina las redes como pocas