La influencia rusa
Donald Trump afirma que fue él quien pidió al abogado de la Casa Blanca Don McGahn y a otros miembros del personal que “cooperaran enteramente” con la investigación del Rusiagate.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comparó ayer la investigación que lleva a cabo el fiscal especial Robert Mueller sobre la trama rusa con “maccarthismo de la peor especie”. Pese a lo cual, se mostró dispuesto a colaborar plenamente. De hecho, en su retahíla habitual de tuits, explicó que había sido él quien había pedido al abogado de la Casa Blanca Don McGahn y a otros miembros del personal que “cooperaran enteramente” con la investigación.
La aclaración del presidente intentaba restar importancia a una información que publicaba el The New York Times según la cual McGahn estaba aportando numerosa información a la investigación. Este abogado habría mantenido ya tres encuentros con Mueller, con el que habría estado hablando por espacio de unas treinta horas.
Entre la información que podía haber aportado McGahn está la relativa a si Trump había o no intentado obstruir a la justicia, que hoy por hoy es el principal problema al que se enfrenta el presidente. Según el diario, el abogado de la Casa Blanca desempeñó un papel importante en los intentos de Trump de cesar a Mueller.
Precisamente, la motivación que tenía McGahn para colaborar era que le había entrado miedo de que decisiones tomadas en la Casa Blanca pudieran interpretarse como una obstrucción a la justicia y acabara teniendo que asumir él problemas legales.
McGahn compartió información sobre comentarios y acciones de Trump durante el despido del director del FBI James Comey y la obsesión del presidente por poner a alguien leal a cargo de la investigación. Pero McGahn advirtió a los investigadores que nunca vio a Trump ir más allá de su autoridad legal.
Trump, en un tuit, dijo que el The New York Times intentaba hacer creer que McGahn era un “chivato al estilo John Dean” (el abogado de la Casa Blanca que implicó a Nixon en el Watergate). “No lo es, le permití cooperar enteramente, no tenemos nada que ocultar”.
Una fuente cercana al presidente reconoció a la agencia Reuters que la cooperación de McGahn fue “un error táctico o estratégico” del equipo legal de Trump y no debería haberse permitido porque McGahn debería haber estado cubierto por inmunidad del poder ejecutivo.
El abogado personal de Trump, Rudy Giuliani, también reconoció que no deberían haberle dejado declarar y que se hizo porque pensaron que era una forma rápida de
Trump dice no tener nada que ocultar y califica la investigación de “maccarthismo de la peor especie”
que se cerrara el caso. Preguntado en televisión sobre por qué no declaraba Trump para aclararlo todo, Giuliani dijo que no serviría de nada. “Diría su versión de la verdad, no la verdad”. “La verdad es la verdad”, le insistió el presentador. “La verdad no es la verdad”, le corrigió Giuliani.