Miembros de ‘La Manada’, increpados en una piscina
Palomares del Río los había declarado non gratos
Los miembros de La Manada que se encuentran en libertad provisional, todos menos Ángel Boza, en prisión por un robo con violencia, siguen siendo noticia allá por donde van. Su presencia el pasado sábado en la piscina municipal de Palomares del Río (Sevilla) causó alarma social entre los bañistas, que les increparon y obligaron a retirarse al campo de fútbol anexo a la pileta, hasta que la instalación municipal cerró sus puertas al público y ellos pudieron abandonar el recinto sin mayores incidentes.
El Ayuntamiento de Palomares informó ayer oficialmente de lo sucedido en un comunicado firmado por su alcaldesa accidental, Juana Caballero (IU), en el que manifiesta que “no vamos a permitir que Palomares del Río se convierta en refugio de violadores ni delincuentes. No vamos a tolerar que nuestra ciudadanía se sienta alarmada por este tipo de visitas indeseables”.
“Los usuarios de la piscina, al reconocer a estos violadores, comenzaron a increparles con gritos en contra de su presencia, por lo que fueron acompañados por un operario municipal a una zona anexa, donde permanecieron hasta que cerró la piscina”, señala Caballero en su comunicado.
La información del Consistorio no aclara cuántos de los cuatro miembros de La Manada que se encuentran en libertad provisional acudieron a la piscina, ni las motivaciones para que estos individuos se trasladaran a esta localidad del Aljarafe sevillano, bastante alejada del área de acción de unos jóvenes nacidos y criados en el centro de Sevilla.
Palomares del Río fue uno de los primeros municipios españoles que declaró, en el mes de mayo, personas non grata a los miembros de La Manada José Ángel Prenda, Antonio Manuel Guerrero, Ángel Boza, Alfonso Cabezuelo y Jesús Escudero en una dura moción de condena.
Algunas fuentes señalan que su presencia el pasado sábado en esa localidad pudo obedecer a un “gesto de desafío”, en la que habrían contado con la colaboración de un operario municipal, cuya gestión y relación con los jóvenes se está investigando. El Consistorio ha abierto un expediente informativo.
El pasado 18 de julio la sección segunda de la Audiencia de Navarra desestimó todos los recursos interpuestos por la Fiscalía, la acusación particular y las acusaciones populares contra el auto del 21 de junio que decretaba la libertad provisional para los cinco condenados de La Manada por abusos sexuales, y no por agresión sexual, a una joven madrileña en los Sanfermines del año 2016, una sentencia que ha levantado una gran polémica.
Todos ellos permanecen en libertad provisional excepto Ángel Boza, que volvió a prisión por el robo de unas gafas de sol en Sevilla y su intento de atropello de dos guardias de seguridad que le dieron el alto.
“No vamos a tolerar que la ciudadanía se sienta alarmada por este tipo de visitas indeseables”, afirma la alcaldesa