La marea roja de Florida alcanza ya 233 kilómetros de costa
La presencia de la marea roja, causada por una microalga tóxica llamada Karenia brevis en el suroeste de Florida, que ha hecho declarar el estado de emergencia en varios condados, se extiende ya a lo largo de 233 kilómetros de la costa con altos niveles de toxinas liberadas en el agua, según informaron ayer las autoridades.
La Comisión para la Conservación de la Pesca y la Fauna (FWC) señaló que ha detectado una “alta concentración” del microorganismo causante de la marea roja, de hasta más de “un millón de células por litro”, en los condados de Manatee y el norte de Collier.
El efecto de la persistente e intensa acción de la marea roja es la muerte de miles de peces, que aparecen sin vida en las playas de estos condados tras ser arrastrados por el agua.
También se han dado casos de “irritación respiratoria” en personas en los condados de Pinellas, Manatee, Sarasota, Lee y Collier, por efecto de las toxinas que liberan estos microorganismos.
Este es uno de los síntomas más frecuentes que experimentan los bañistas durante una marea roja, que padecen picazón en la garganta y tos. El pasado 13 de agosto, el gobernador de Florida, Rick Scott, declaró el estado de emergencia en siete condados afectados por la marea roja. La orden del gobernador Scott permite que se destinen “fondos significativos y recursos” a los condados Collier, Lee, Charlotte, Sarasota, Manatee, Hillsborough y Pinellas, en la costa sudoeste de la península de Florida, y los afectados por un fenómeno que se produce casi anualmente en estas costas del golfo de México, pero que nunca había alcanzado la gravedad actual.
La FWC ha hecho un llamamiento a la población para que se abstenga de retirar ejemplares grandes de peces muertos, como delfines, manatíes o hasta ballenas, y ha exhortado a que esas labores las hagan los expertos.