‘Bonjour’, ‘bon appétit’, ‘merci’... v
Colas en los súpers, gasolineras y estancos de La Jonquera donde los franceses compran más barato
Un cochecito infantil se convierte en un improvisado carrito de la compra para transportar cajas de cerveza, botellas de whisky y bolsas de aperitivos de kilo. Lo empuja una mamá que lleva a su bebé colgado en una mochila. Los supermercados de La Jonquera son casi parada y fonda obligada para los miles de franceses que este verano están cruzando la frontera hacia las playas de España. Y en los surtidos carros, si hay un producto que predomina este no es otro que el alcohol. “Es mucho más barato que en Francia. Se pueden ahorrar entre 5 y 7 euros por botella”, explica Aliou Boiro, jefe de turno de un concurrido súper de la zona comercial de Els Límits. Florence y Julian Chaussat, una pareja de mediana edad de Limoges, se dirigen a Sitges con el maletero bien repleto. También los Rossignol, de Béziers, se han surtido de productos de charcutería, aceitunas, objetos de limpieza, mejillones y calamares antes de dirigirse a Empuriabrava, su destino vacacional desde hace 25 años. Sorprende que entre el alcohol no predomina el tamaño estándar. Las denominadas botellas mágnum, que equivalen a dos botellas estándar, sobresalen en muchos carritos de la compra. También en las bolsas de patatas fritas y en los refrescos impera el tallaje XXL. Tras el súper, la otra parada obligada para los fumadores son los estancos. Los del municipio fronterizo son los que más facturan de toda España. Las colas para comprar tabaco no echan para atrás a los clientes galos. El ahorro es significativo. “Existe una diferencia de más de tres euros por cajetilla”, explica