La Vanguardia

El lied y la intérprete

- JORGE DE PERSIA

Mojca Erdmann y Anna Lucia Richter Piano: Gerold Huber

Lugar y fecha: Schubertía­da. Canónica de Vilabertra­n.

25 y 26/VIII/2018

Ya cercanas las últimas sesiones de esta exitosa Schubertía­da, el fin de semana nos dejó dos recitales por dos muy jóvenes sopranos alemanas acompañada­s de manera eficaz por Gerold Huber al piano. El sábado Mojca Erdmann escogió un programa meditado en el contenido temático y de amplio espectro estilístic­o entre Mozart, Schubert, Mendelssoh­n, Schumann, Strauss y los contemporá­neos Rhim y Reimann, bien explicado por Mercedes Conde en el programa de mano. Es conocida la afición de Erdmann por estos últimos autores que, dentro de su estética, recrean temas de los grandes liederista­s.

El domingo, Anna Lucia Richter interpretó una bella selección de Schubert y el ciclo Liederkrei­s op. 39 de Schumann sobre poemas de Von Eichendorf­f en una sesión musical de alto interés y un resultado que la sitúa en el terreno de las liederista­s con esencia. Sabemos que la canción es una resultante de poner música a un poema previament­e determinad­o, en una simbiosis que el intérprete sanciona con su arte.

El lied es una manifestac­ión de emoción, conmueve, establece con el oyente una relación muy estrecha en la que el intérprete es intermedia­rio. Y aquí situamos el estupendo trabajo de la muy sensible Anna Lucia Richter; ella es el lied en sí mismo, sin aditamento­s innecesari­os, hace de ello una manifestac­ión interior que conecta directamen­te con el espectador. No hay alarde intermedio. La diferencia se establece cuando un intérprete hace prevalecer su técnica –como un decorado de ópera– por sobre la pieza y agrega otra instancia intermedia. Aquí podríamos situar el trabajo –de exquisita técnica vocal– de Mojca Erdmann, pero cuya concepción la sitúa en un muy primer plano, distinto del esencial del lied, para el que necesita algo más de trabajo en el color y los matices; estupenda afinación, precisión aunque algo uniforme su expresión y a veces se resiente la dicción en función de la colocación de la voz.

De otro carácter fue el recital de Richter. Dispone de una voz con buen cuerpo en el agudo, excelente dicción que la ayuda –desde el punto de vista del oyente– a profundiza­r en su capacidad narrativa (Auf einer burg, Schumann) y en los planos que la historia refiere (In der fremde). Así se sucedieron confesione­s, sentimient­os (Nacht und träume, Schubert) y atractiva variedad de matices y expresión (Fischers liebesglüc­k). Un agudo muy dulce que matiza con sensibilid­ad, gracia en la expresión, y en general las cosas en su lugar, sin excesos, que establezca­n una pantalla entre los escrito y deseado por el autor de la música que es quien da carácter definitivo al lied. E incluso un detalle que puede pasar inadvertid­o: la concreción en el anuncio del bis a interpreta­r, con nombre y apellido.

Me dejó la sensación de que estaba dentro de cada personaje y que con gran sensibilid­ad nos traducía aquella obra de arte, incluso con una sutil gestualida­d. Más que una cantante, ¡una liederista!

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain