Dolorosa retirada
El alicantino acaba su carrera en los grandes y prepara su adiós
Con un set en contra y break arriba en el segundo, David Ferrer se despide del último Grand Slam de su carrera lesionado, sin poder acabar el partido del Open de Estados Unidos contra Rafa Nadal.
Lo que prometía ser una batalla acabó en inesperada retirada y David Ferrer se despedía así del último Grand Slam de su carrera: con un set en contra en el primer set y con break arriba en el segundo. Se abrazó a su amigo, contrincante y compañero de Copa Davis, Rafa Nadal, y cuando se iba cojeando de la cancha, Brad Gilbert, que generalmente entrevista a pie de pista al ganador de cada partido, corrió tras él y le preguntó por su retirada. “Tenía dolor. Lo intenté. Siento no poder terminar”, justificaba al público. De sus 208 partidos de Grand Slam, este ha sido el único que Ferrer no pudo completar. “Os echaré de menos”, prosiguió. “Este es mi último partido de Grand Slam”. Y ahí el público le ovacionó. Humilde, como siempre, el alicantino les dio las gracias y se marchó de la Arthur Ashe, dejando que Nadal volviera a ser el centro de atención, algo a lo que lleva muchos años acostumbrado.
Ferrer deja Nueva York muy orgulloso de lo que ha logrado en estas pistas, en las que llegó dos veces a semifinales, y de cómo se ha despedido de ellas. “Cuando vi el cuadro, me pareció un regalo”, reflexionaba con una sonrisa. “Ha sido muy especial. He acabado mi último Grand Slam en la pista central, con Rafael Nadal, un buen amigo, y con mi familia y mis amigos cercanos que lo han podido ver. Soy afortunado”.
“Me apena lo que le ha pasado. Merece un mejor final de Slams en su carrera, pero estoy seguro que tendrá una despedida digna de él en el torneo en el que decida retirarse”, auguraba Nadal. “Y cuando lo haga, será uno de esos jugadores a los que el circuito echará de menos”.
El número uno se deshizo en elogios sobre su amigo. “Creo que no ha tenido suerte en la época en la que le ha tocado vivir, porque ha habido tres o cuatro jugadores que han ganado todos los torneos importante durante los mejores años de David. Esta ha sido la realidad”, decía el mallorquín. “Ganar un grande no es una parte básica de la carrera de un jugador. Para mí tiene mucho más mérito la carrera de David, con la regularidad que ha conseguido y el nivel altísimo que ha mantenido durante muchos años. Hay algunos tenistas que tienen grandes y que han sido peores jugadores que él. Yo preferiría la carrera de David”.
Nadal no fue el único en alabarle. Roger Federer lo comparaba con Mad Max en un tuit. “Mi máximo respeto para el salvaje de autopista @DavidFerrer87”. Del Potro también habló de su ética de trabajo y Tommy Robredo dijo que tendríamos que agradecerle lo mucho que ha aportado al tenis.
Ahora, Ferrer se dedicará a descansar unas semanas con su familia, para poder prepararse para los torneos que ha escogido hasta el fin de su carrera profesional, que quiere concluir en Barcelona y Madrid el año próximo. “Estoy contento. Me encanta el tenis”, puntualiza. “Pero veo que no puedo mantener la regularidad. No puedo jugar más de uno o dos partidos y así no puedo tener un buen ranking, ni puedo jugar en los mejores torneos con los mejores jugadores. Si tuviera la oportunidad de jugar Grand Slams o Masters 1.000 no dejaría el tenis, pero ya no tengo esa fuerza física. Por eso quiero seleccionar los torneos para los que quiero estar bien y finalizar mi carrera con mi gente”.