Protesta vecinal por los robos en Tiana
Los vecinos de la urbanización Les Costes hacen sonar las alarmas de los domicilios para reivindicar más policía y mayor seguridad
Cada día, a las nueve de la noche la estridencia de decenas de alarmas de domicilios sonando al unísono rompe el silencio en la tranquila población de Tiana, en el bajo Maresme. Es la protesta que han ideado los miembros de la Asociación de Vecinos de la urbanización Les Costes para reivindicar mayor seguridad frente al incremento de robos y asaltos a viviendas que se producen mientras las familias están dentro. Se trata de una nueva oleada de robos que les ha obligado a movilizarse. En el último mes se han producido robos en ocho viviendas de la zona.
“El problema es que no hay agentes de policía, ni Mossos” por lo que los delincuentes campan a sus anchas por la urbanización. “Un 70% de las casas han sido asaltadas o forzadas alguna vez” argumentan los vecinos para justificar su acción. “La policía se va de vacaciones y sólo queda una patrulla en el pueblo”.
La alcaldesa de Tiana, Esther Pujol, discrepa y observa cierta “intencionalidad política en la protesta”. Detalla que “hemos reforzado la seguridad con una patrulla más” y ahora empieza la tercera fase de colocación de más cámaras de seguridad “el 25% de las cuales se ubican en la urbanización”. Pujol recuerda que se trata de un espacio “con calles privadas” por lo que entiende que los vecinos deberían reforzar su seguridad “con vigilancia privada”.
Coinciden tanto los vecinos como la alcaldesa en que el problema radica en la falta de efectivos de los Mossos d’Esquadra para reforzar el contingente. “Pediremos al nuevo conseller, Miquel Buch (exalcalde de Premià de Mar), que nos ayude” reclama Pujol, ya que “él más que nadie sabe que los recursos municipales son limitados”.
Para los vecinos el problema es más complejo, pero también están dispuestos a acudir al Departament d’Interior, ya que creen que “el operativo de los Mossos no es el correcto”. Detallan que “estamos en una zona de fácil acceso, a veinte minutos de las rondas y con acceso directo a la B-500, lo que facilita la llegada de los delincuentes. En esta ocasión, sin embargo, según la alcaldesa “no se trata de bandas organizadas” como sucedió en el 2012 con los albano-kosovares y los peruanos. “Son ladrones oportunistas” asegura. La policía sigue la pista a una pareja de magrebíes que ya han sido identificados en otras ocasiones.
Junts per Tiana, el principal partido en la oposición, apoya la reivindicación vecinal y reclama “una estrategia contra los robos”. Recuerdan que el caso Enredadera, que ha provocado la imputación del jefe de la policía local, Tomàs Cabrejas, “exige una respuesta urgente” ya que es imposible garantizar la seguridad “sólo con dos policías para todo un pueblo” de más de 8.500 habitantes. Reclaman la inmediata redacción de un plan de seguridad que se elabore en base a una auditoría llevada a cabo por expertos en seguridad.
La alcaldesa socialista, Esther Pujol, aprecia intencionalidad política en las movilizaciones vecinales