El sedentarismo amenaza la salud de la cuarta parte de la población española
Los riesgos por insuficiente actividad física afectan más a la mujer, alerta la OMS
Alrededor del 26% de la población española hace una actividad física insuficiente para mantenerse en una situación saludable, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las mujeres españolas tienen una actividad física mucho menor que los hombres, de manera que un 30% de ellas muestra niveles de actividad insuficientes, frente al 22% de los varones. En el ámbito global, una de cada tres mujeres y uno de cada cuatro hombres no hacen suficiente actividad física para preservar la salud, lo que representa una cuarta parte de la población mundial (1.400 millones de personas).
Todo esto implica un aumento en el riesgo de sufrir de enfermedades cardiovasculares, diabetes de tipo 2, demencia y ciertos tipos de cáncer. La OMS recomienda al menos mantener semanalmente niveles de actividad física de 150 minutos en grado moderado a intenso o 75 minutos de esfuerzo físico fuerte.
Esta es la primera investigación que ofrece estimaciones globales sobre la insuficiencia de actividad física –considerado uno de los factores principales de las enfermedades no transmisibles– en un periodo de 16 años, del 2001 al 2016. Las conclusiones demuestran que hubo escasos progresos en mejorar los niveles de actividad física en ese lapso.
“A diferencia de lo que ocurre con otras amenazas a la salud, los índices de actividad física insuficiente no están cayendo en el mundo y, de media, la cuarta parte de todos los adultos no alcanza el nivel apropiado para tener una buena salud”, resumió la autora
principal del estudio y experta de la OMS, Regina Guthold. La investigación contó con la participación de 1,9 millones de personas mayores de 18 años, en 168 países.
Una de las conclusiones más sorprendentes es que el nivel de inactividad física es dos veces
más alto en los países ricos que en los países de bajos ingresos, una tendencia que se ha afianzado en el periodo de estudio.
En concreto, el 37% de la población de los estados ricos presentaba niveles insuficientes de actividad física en 2016, frente al 16% del otro grupo de países. Por re- giones, Latinoamérica y el Caribe presentan los mayores niveles de actividad física insuficiente (39%), seguido del grupo de países occidentales de altos ingresos (37%). La explicación está en la transición hacia ocupaciones más sedentarias y al transporte motorizado.
“La rápida urbanización ha provocado que las personas abandonen lugares donde debía ejercitarse para trabajar, especialmente en la agricultura, para instalarse en urbes donde están desempleadas o tienen empleos en la industria, mucho más sedentarios y en los que se hacen movimientos repetitivos”, afirmó la autora principal del estudio y experta de la OMS, Regina Guthold.
Fiona Bull comentó que el uso masivo del uso de aparatos electrónicos, como los ordenadores, los teléfonos móviles y las tabletas, entre otros, ha incrementado mucho los hábitos sedentarios, y, en consecuencia, los índices de inactividad física han aumentado. “Todos usamos aparatos electrónicos más a menudo y más tiempo, empleamos más tiempo para ir a trabajar y estos trayectos se hacen de forma sedentaria. Todos estos elementos suman”, agregó Bull. El país donde la inactividad física es mayor es Kuwait (67%), seguido de Samoa (53%), Arabia Saudí (53%) e Irak (52%). En el extremo contrario están Uganda y Mozambique, donde sólo el 6% de la población tiene actividad física insuficiente.
La investigación alienta a los países a adoptar políticas nacionales en favor de modos de transporte no motorizados, como caminar o ir en bicicleta, así como la participación de la gente en actividades deportivas en su tiempo libre. “Estas políticas son particularmente importantes en países de urbanización rápida, como Argentina, Brasil y Colombia”, señala el documento.
A nivel global, las mujeres aparecen como menos activas físicamente que los hombres, excepto en el sudeste asiático. La OMS reclama medidas para promover y mejorar el acceso de las mujeres a oportunidades de actividad física que sean seguras, asequibles y culturalmente aceptables.
El 37% de ciudadanos en los países ricos incumple los niveles de ejercicio recomendables