El bigote más famoso de Hollywood
BURT REYNOLDS, ACTOR DE CINE (1936-2018)
El actor estadounidense Burt Reynolds murió ayer a los 82 años a causa de un ataque al corazón en el Jupiter Medical Center, en el sur de Florida, según informó su representante, Erik Kritzer, al medio especializado The Hollywood Reporter.
Burton Leon Reynolds Jr. nació el 11 de febrero de 1936 y creció en Florida. Era un buen atleta y jugó al fútbol americano en la universidad en la década de 1950, antes de sufrir un accidente automovilístico que lo apartó de las pistas. Fue entonces cuando se trasladó a Nueva York y comenzó a actuar en papeles secundarios en el teatro y la televisión, antes de hacer su debut en el cine en 1961. Empezó así una larga carrera cinematográfica en la que estuvo nominado al Oscar por su actuación en Boogie nights, dirigida por Paul Thomas Anderson en 1997, y en la que interpreta a un director de cine porno.
En la actualidad, Reynolds estaba trabajando en el último proyecto de Quentin Tarantino, Once upon a time in Hollywood, cuyo estreno está previsto para el verano del año que viene. En esta película, ambientada en Los Ángeles en 1969, el veterano actor comparte cartel con Leonardo DiCaprio y Brad Pitt.
La imagen de Burt Reynods, caracterizada por su poblado bigote, fue un icono de Hollywood desde que alcanzó el éxito con Deliverance (titulada Defensa en España), de John Boorman, en 1972, una película que recibió la aprobación de la crítica –su director estuvo nominado al Oscar– y el público. En ella, Reynolds interpreta a un tipo duro que, junto a tres amigos –Jon Voight, Ned Beatty y Ronny Cox, en el filme–, inicia un viaje en canoa cada vez más asfixiante a través del estado de Georgia.
Pero tal vez los papeles que más contribuyeron a su proyec- ción profesional fueron los que protagonizó en comedias de acción –en las que a menudo él mismo rodaba las escenas de mayor riesgo–, como The Longest Yard (El rompehuesos), dirigida por Robert Aldrich en 1974; Smokey and the Bandit (Los caraduras), de Hal Needham, 1977, o Los locos del Cannonball (Hal Needham, 1981), que dieron a Reynolds fama mundial.
Gracias a papeles como éstos y a su atractivo físico y personal, que lo llevaron a convertirse en un mito erótico (apareció desnudo en la revista Cosmopolitan en 1972), Reynolds fue una de las estrellas más taquilleras del Hollywood de finales de los años setenta y principios de los ochenta del siglo pasado.
Pero después de aquellos años dorados de éxito y popularidad, Burt Reynolds atravesó cierto declive profesional, del que no se recuperó hasta los años noventa, primero con la serie de televisión Evening shade y en 1997 con Boogie nights.
La vida personal de Reynolds a veces eclipsó sus películas, con matrimonios que terminaron en divorcio con las actrices Loni Anderson y Judy Carne y romances con Sally Field y Dinah Shore, entre otras. Reynolds también fue objeto de atención mediática por sus problemas financieros y ciertas adicciones.
Muchas de sus numerosas películas se ambientan en el sur de Estados Unidos y en ellas Reynolds suele aparecer como el típico buscavidas avispado y simpático que se enfrenta a la autoridad, como en Los caraduras.
Reynolds también dirigió varias películas en las que actuó, entre ellas Gator (1976), The end (1978), Sharky’s machine (1981) y Stick (1985), y el fracaso más estrepitoso no le fue ajeno, como el que le granjeó el musical At long last love, de 1975, una obra por la que su propio director, Peter Bogdanovich, se disculpó.
En cuanto a sus sonadas renuncias, Reynolds rechazó papeles tan importantes como el de Han Solo en La guerra de las galaxias, que fue para Harrison Ford; o el de James Bond. Tal vez por estas decisiones, el actor confesó en el año 2012: “Opté por lo más divertido. No siempre por lo más desafiante”.
Al ser preguntado en una ocasión sobre su propio epitafio, Reynolds dijo: “Vivió una vida extraordinaria e hizo todo lo posible, lo mejor que pudo, para no hacer daño a nadie”.
Reynolds estuvo nominado al Oscar por ‘Boogie nights’, en la que interpreta a un director de cine porno
Su apariencia física y las comedias de acción que protagonizó lo lanzaron a la fama en los años setenta