Un desfile tranquilo
Los actos de aniversario se centran en el desarrollo económico y la reunificación
La voluntad de Corea del Norte de cambiar su imagen tuvo su reflejo en el desfile militar del 70.º aniversario, dominado por las referencias a la paz y al desarrollo económico, a la vez que se ocultaban los típicos misiles nucleares.
El régimen norcoreano escenificó ayer su intención de continuar la distensión diplomática, especialmente con sus vecinos del sur y con Estados Unidos. En la conmemoración del 70.º aniversario se celebró un inusitado desfile militar, más de la mitad del cual estuvo centrado en la paz y el desarrollo económico. Se renunció a exhibir misiles de largo alcance y en su lugar esta vez hubo más globos de colores y flores.
Un mar de espectadores observó como siempre el desfile en el que miles de soldados y columnas de tanques pasaron revista ante el líder norcoreano Kim Jong Un. Pero, a diferencia de los dos años anteriores, esta vez no se exhibieron misiles intercontinentales ni hubo pruebas nucleares previas.
Corea del Norte suele usar las festividades nacionales para exhibir su potencia militar. Así que no había duda de que este año el régimen había rebajado el tono bélico y subrayaba el objetivo declarado de Kim de desnuclearizar la península de Corea. Eso era lo que había mantenido en sus recientes reuniones con el presidente surcoreano Mun Jae In y en las cumbres con el presidente estadounidense Donald Trump y el presidente chino Xi Jinping.
Durante el desfile, Kim fue visto riéndose en el palco en compañía de su invitado de honor y enviado de Pekín, el presidente del Parlamento chino, Li Zhanshua. Kim saludó a la multitud antes de irse pero no hizo ningún comentario público. El representante chino sí regresó a Pekín con un mensaje claro de buena voluntad: Corea del Norte se mantiene fiel al pacto de desnuclearización acordado con el presidente Trump y espera que Estados Unidos cumpla su parte.
El anuncio supone un intento de recuperar la cordialidad que hubo en la reunión de junio entre Trump y Kim, y que se había visto ensombrecida por las críticas de Washington ante la falta de progresos sobre el terreno. El presidente Xi, aprovechó la festividad para hacer llegar a Kim una felicitación en la que saludaba el “nuevo periodo histórico” en el que entraba el país y confirmar así su apoyo al proceso de distensión. También Trump agradeció a Kim la supresión de misiles en el desfile.
El otro gran tema, la reunificación
Trump agradece a Kim que deje de exhibir misiles de largo alcance y Xi saluda “un nuevo periodo histórico”
de Corea estuvo presente en las celebraciones. Por primera vez desde la división de la península en la guerra de 1950 a 1953, una multitud de norcoreanos ondearon banderas de una Corea unificada en uno de los actos. “Todos los coreanos deben unir fuerzas para lograr la unificación en nuestra generación. La unificación es la única forma en que los coreanos pueden sobrevivir”, decía el editorial del periódico oficial norcoreano Rodong Sinmun.
Kim y Mun se reunirán en Pyongyang del 18 al 20 de septiembre por tercera vez este año y discutirán “medidas prácticas” hacia la desnuclearización.