El mundo de ‘Terra baixa’ y el de las migraciones
La Fira de Tàrrega regresará el próximo año un día antes, del 5 al 8 de septiembre, y ya con nueva dirección. Por lo pronto, ayer concluyó etapa con montajes tan diversos como la danza rural de Labranza, del colectivo Lamajara, o el infantil antirracista Les 7 diferències, de los valencianos El Pont Flotant. Labranza tiene lugar en un campo fuera de la ciudad en el que los tres protagonistas han estilizado los movimientos de las gentes del mundo rural cuando labran, esparcen semillas o arrean al ganado. También cuando están agotados tras repetir una y otra vez, con constancia, los mismos movimientos. Y cuando disfrutan de asueto y de diversión. Por momentos, viéndolos evolucionar palillo en la boca, con ropas claras y sufridas, uno puede imaginar estar en la dura Terra baixa de Manelic. También, cuando recogen la cosecha, por momentos están ahí Las espigadoras de Millet. Un trabajo logrado. En cuanto a Les 7 diferències, se trata de la primera propuesta infantil de El Pont Flotant, unos clásicos de Tàrrega, y aborda el tema del racismo y de las diferencias incorporando a actores de China, Perú, Bangladesh y Guinea Ecuatorial, cuyas partidas de su tierra a Valencia son recreadas en la pieza. La plástica escénica de la compañía sigue siendo prodigiosa y con apenas unas cajas, unas telas y unos marcos recrean los diferentes viajes, pero el texto quizá se pasa de frenada y los niños podrían haber enfrentado algo más complejo.