Dovizioso gana y Márquez, más líder
Dovizioso vence en Misano ante el catalán, que se distancia en el liderato con 67 puntos de ventaja
Por una vez, Andrea Dovizioso y Jorge Lorenzo, irreconciliables vecinos de Ducati, están de acuerdo en algo: “El Mundial está todavía más complicado porque Marc ha hecho segundo”, decía el mallorquín. “Está muy difícil porque Márquez, en todas las condiciones, siempre está ahí y sabe llevar la Honda al límite”, añadía el italiano. Los dos rivales que más sombra hacen al tetracampeón prácticamente tiran la toalla, cuando el Mundial de MotoGP afronta ya su último tercio: el piloto de Cervera empieza a estar lejísimos...
Nada menos que 67 puntos, más de dos victorias y media, a falta de seis carreras, acumula de crédito Marc Márquez para empezar a ver con nitidez el camino hacia su quinta corona de MotoGP. El segundo puesto de ayer en Misano –su sexto podio consecutivo– fue un pequeño paso adelante hacia el título, más teniendo en cuenta que su hasta ahora principal perseguidor, Valentino Rossi, sigue retrocediendo (7.º) en su particular via crucis de falta de competitividad.
Con Yamaha inmersa en una profunda crisis –lleva 22 carreras sin ganar, un periodo que iguala su peor racha histórica (entre 1997 y 1998)–, y con las Ducati repartiéndose las victorias que se le escapan a Márquez (3 Lorenzo, 3 Dovizioso), el 93 echa cuentas y los números le cuadran: 9x6=54. Si en todas las carreras que faltan (6) acaba en el podio (-9 puntos), aunque las gane todas Dovi, será campeón. “De cinco en cinco (puntos) no nos atrapan. La clave de la temporada es puntuar en todas las carreras que quedan y así creo que podremos ser campeones”, calcula Marc.
En Misano, territorio Rossi (más por cercanía a su casa que por dominio en la pista), se presentaba una buena ocasión para que el 46 se reenganchara a la pelea por el título. Pero el Dottore claudicó y no se le vio ni peleando por los puestos de podio. Igual que su compañero Viñales (5.º). Así que sin la intimidación de las motos azules, el único rival de Marc son las máquinas rojas de Ducati. “Es difícil luchar contra ellas, aceleran mucho, toca recuperar en las frenadas y no podía”, admitía el de Cervera, que una vez se escapó Dovizioso en la sexta vuelta tras superar a Lorenzo, se marcó el objetivo de acabar 2.º. “Iba justo, pero veía que Jorge también, así que estaba aguantando a ver si fallaba él o si me la podía jugar al final”.
Con el italiano distanciado con un margen de seguridad de 2 segundos, Márquez y Lorenzo, próximos compañeros en el Repsol Honda, comenzaron a ofrecer otro duelo espectacular, como en las últimas carreras. Primero golpeó Marc, arrebatando la segunda plaza a Jorge en la vuelta 14 con un interior al abrirse el mallorquín. Aguantó cinco vueltas delante. Se la devolvió en la 19 Lorenzo soltando frenos para recuperar la segunda plaza. Dovizioso estaba lejos, a 2,3s, pero Jorge activó el modo remontada. En cinco giros le recortó un segundo, se puso a 1,3s... pero la operación caza se frustró con una caída a falta de dos vueltas al deslizarle la rueda. “Ha sido una pena. La segunda posición me sabía a poco y quería intentar la victoria, sobre todo después del fin de semana, de la pole y el gran ritmo de ayer. Al final tuve que forzar”, admitía Jorge, que ve frenada su progresión y sus opciones de erigirse en perseguidor de Márquez.