Nueva referencia ceretana
La Buixeda, en Alp, con Enrique Valenti al frente
Algunos de nuestros lectores se habrán preguntado cómo superan los largos inviernos muchos de los restaurantes de esta comarca pirenaica. Es sabido que buena parte de los cocineros que han abierto un local en esta zona han fracasado en su proyecto. ¿Por qué? ¿Qué extraño maleficio pende sobre un territorio tan frecuentado?
En esta sección hemos hablado de las pizzas de Fabián, de Cal Jet, de Massó en el hotel Paulita, de la Torre del Remei de Josep Maria Boix, de Ca la Nuri, de L’Embut en Llívia, del Hostal d’Escadarcs, del Querforadat, del Sant Marc de Valicourt y de algunos más: muy pocos siguen a día de hoy.
Este verano, otro chef ha desembarcado en los alrededores del pueblo de Alp. Quien lidera este proyecto es un viejo amigo de todos ustedes si siguen 5 a Taula, y autor de restaurantes de éxito en Barcelona como Casa Paloma, Chez Coco o el Bar Bas. Actualmente está al frente del
Marea Alta.
Enrique Valenti es fino y preciso en sus objetivos, exigente en su cocina y enormemente social en su trato. Precisamente con estos valores, largamente contrastados, La Buixeda ha llenado desde el primer día. Ha sido un verano largo y fatigante que ha expandido la buena nueva por toda la comarca de la Cerdanya.
Valenti trabaja en este elegante caserío de Alp una cocina de montaña que se entiende y se degusta como tal: sabrosa, recia, y con clase. Variada y apetitosa; charcutería del país bien presentada, garbanzos aliñados con buen toque, tomates de temporada con bonito picante, tortillas históricas de trinxat, de salsa brava o de cap i pota.Y, sobre todo, los guisos que Enrique Valenti maneja como nadie, recuperando la tradición y sin olvidar la evolución: las lentejas con codornices, las judías de Santa Pau, el rabo de buey o los canelones de fiesta mayor.
Un recetario más refinado que lo que el simple enunciando de los mismos deja entrever. Unos platos más cocinados de lo que puede esperar la clientela. ¡Bravo Enrique! Has dado de nuevo en la diana y ojalá que en esta ocasión la parroquia esté a la altura.