Los costes laborales en la eurozona suben al mayor ritmo desde el 2012
España, a la cola de los incrementos, con un aumento del coste de sólo el 0,7%
El Banco Central Europeo (BCE) informa de que la economía de la zona euro ha iniciado una ligera desaceleración y que el crecimiento habría tocado techo en la primera mitad del 2018. Por ello resulta paradójico que, después de encadenar muchos trimestres de estrecheces, ahora que la recuperación parece haber alcanzado sus límites, los indicadores laborales empiecen a mostrar signos de revitalización.
Los incrementos de los salarios, grandes ausentes de la última etapa expansiva de la economía europea, empiezan a aparecer, como mostraba ayer Eurostat. Según el organismo estadístico de la Unión Europea (UE), los costes laborales por hora trabajada en la zona euro registraron durante el segundo trimestre del 2018, una subida del 2,2% respecto al mismo tramo del ejercicio anterior, lo que representa el mayor incremento desde finales del 2012, mientras que en el conjunto de la Unión Europea (UE) la subida interanual fue del 2,6%, la más pronunciada desde el tercer trimestre del 2009.
El componente salarial de estos costes laborales por hora se incrementó entre abril y junio un 1,9% en la zona euro, frente al 1,8% del trimestre precedente, mientras que el componente no estrictamente salarial (cargas sociales) aumentó un 2,9%, frente al 2,8% del trimestre anterior, lo que también supone el mayor incremento en cinco años. Entre los Veintiocho, los salarios por hora aumentaron un 2,6% en el segundo trimestre, tras subir un 2,7% en los tres meses anteriores, mientras que los elementos ajenos al salario aumentaron un 2,6%, frente al incremento del 3,1% del primer trimestre del año.
La mayor subida de los costes laborales por hora en la UE durante el primer trimestre se registró en Rumanía (+15,6%), Letonia (+11,7%) y Hungría (+10,2%). En el segundo trimestre no se registró ningún descenso. En el caso de España, los costes laborales por hora subieron en el segundo trimestre un 0,7%, tras haber crecido 1,4% en los tres meses anteriores, lo que sitúa a España entre los países en los que menos subió este indicador, solo por detrás de Luxemburgo (+0,6%).
El componente salarial en España subió en el segundo trimestre un 0,6%, tras aumentar un 1,6% en los tres meses anteriores, mientras que el alza del componente extrasalarial subió un 1,1%, al mismo ritmo que en el primer trimestre del año.
La debilidad salarial ha sido uno de los factores estructurales de la recuperación en Europa y EE.UU.
La debilidad salarial se ha convertido en uno de los factores estructurales de la última recuperación. No sólo en Europa, sino también en Estados Unidos, donde el desempleo, porcentualmente, es la mitad que el de la media europea. La Reserva Federal (Fed) ha considerado este hecho (el bajo crecimiento de los salarios) uno de los factores que tener en cuenta a la hora de aplicar sus políticas. El bajo aumento de los salarios, concluye la Fed, aleja el temor a la inflación.