LIBRO DESDE LA PRISIÓN
“He pasado una noche horrible”. El dietario de Joaquim Forn Escrits de presó, que sale a la venta el 22 de septiembre, recoge este lamento en más de una ocasión. El exconseller relata la relación con otros presos, las dudas sobre la estrategia política y
11 de diciembre. El compañero de celda.
“Me doy cuenta de que todavía no he dicho casi nada de la convivencia con Oriol. Es buena, pero me sorprende lo poco hablador que es. Es capaz de estar largos ratos sin pronunciar ninguna palabra. Lo respeto, lógicamente. Es curioso que lo diga yo, que también tengo fama de introvertido”.
22 de enero. No callar.
“Algunos errores que hemos cometido en el pasado se habrían podido evitar si todos hubiéramos hablado claro, si hubiésemos explicado las cosas tal como son, evitando creernos (y hacer ver a los otros) cosas absolutamente alejadas de toda realidad”.
12 de marzo. Formar gobierno.
“¿De verdad nos creemos que, en la conducción del día a día, es necesariamente malo levantar el pie del acelerador? ¿De verdad nos creemos que siempre es negativo hacer un alto en el camino para coger fuerzas, descansar, observar el entorno y reflexionar un poco? ¿Realmente nos creemos que el gobierno que hemos tenido hasta ahora no nos sirve para nada? ¿Que no nos ha servido nunca para nada? De verdad que no lo puedo entender, y me sabe muy mal, muchísimo. Hace falta que formemos gobierno, y lo pienso honestamente. Ya es casi una obsesión
que se me agrava y me persigue con el paso de los días y, al mismo tiempo, lógicamente, no tengo ninguna duda que soy y seguiré siendo independentista”.
23 de marzo. Marta Rovira se marcha a Suiza.
“Me he despertado muy nervioso por la comparecencia ante el juez Llarena de seis diputados (...) De hecho, Carme Forcadell, Dolors Bassa y Marta Rovira ya no son diputadas (...) Nos lo ha dicho, a primera hora de la mañana, Pere Soler, el exdirector de los Mossos, que también nos ha explicado que Marta Rovira no se ha presentado en el Supremo y que se ha ido al extranjero. Respeto su decisión, no quiero emitir juicios, pero al mismo tiempo es evidente que eso no nos ayuda mucho a los que estamos en prisión: abona la posibilidad del riesgo de fuga, como si tuviéramos la intención de convertir el exilio en el terreno de juego de la política catalana”.