Valtònyc no se mueve
El rapero mallorquín huyó después de ser condenado a tres años por sus canciones
La justicia belga ha denegado tajantemente la solicitud de extradición del rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, más conocido como Valtònyc, por considerar que ninguno de los delitos por los que le reclama la justicia española es motivo de castigo en Bélgica.
Nuevo varapalo de la justicia belga a los tribunales españoles. Si primero fue la denegación de la extradición de los exconsellers por una cuestión de orden, y después la tramitación de una demanda contra el juez Pablo Llarena, ayer fue un juez de primera instancia de Gante el que denegó la extradición del rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, más conocido por Valtònyc. Fue un rechazo rotundo, no se aceptó entregarlo por ninguno de los tres delitos por los que está condenado en España; ni por apología del terrorismo, ni por injurias a la Corona, ni por amenazas. El juez belga no discute que en España estos hechos sean delito, pero su resolución deja claro que, a su entender, no lo son en Bélgica.
Valtònyc huyó de España el 23 de mayo de este año, el día anterior a que terminara el plazo para entrar voluntariamente en prisión, después que el Tribunal Supremo hubiera desechado su último recurso. El rapero mallorquín escribió un tuit avisando que “no se lo voy a poner tan fácil” y se le perdió el rastro durante unas semanas. Está condenado en firme por la justicia española a tres años y medio de cárcel. Valtònyc reapareció el 5 de julio en Bélgica, donde se encargan de su defensa los mismos letrados que defienden a Carles Puigdemont y a los exconsellers. Y de momento, con éxito.
Al salir de la vista en el que el juez de Gante leyó la resolución, Valtònyc se declaró feliz y triste a la vez: “Estoy muy contento de poder ser libre, que no me extraditen. Estoy muy triste de ver que mis compañeros de España no lo están”. Valtònyc puede moverse con entera libertad en Bélgica pero no entrar en territorio español, donde sigue siendo válida la orden de búsqueda y captura. La vista fue breve, sólo duró los 7 minutos que el juez invirtió en leer su resolución. Desmontó las tres acusaciones, una a una. No lo extradita por apología del terrorismo porque este delito no existe en Bélgica, ni por injurias al rey. Tampoco por amenazas porque, en la legislación belga para ser delito “tienen que ser por escrito”, no sólo verbales, afirmó a este periódico el abogado Paul Bekaert. En su estrategia de defensa, los abogados utilizaron la sentencia de mayo de este año del Tribunal de Estrasburgo contra España, cuando falló que quemar fotografías del rey forma parte de la libertad de expresión.
Otro de los abogados, Gonzalo Boye, dijo que el caso concierne a la libertad de expresión y que “ninguna de las frases de sus canciones tenía contenido criminal”. Boye consideró que esta resolución va a ayudarles en el recurso que presentarán “en breve” al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo. Tienen tiempo hasta el 20 de octubre, cuando vence el plazo. “Lo de hoy aquí –dijo Boye– es un refuerzo de nuestro planteamiento en Estrasburgo. Es decir, que unos mismos hechos no pueden ser delito en un país y no serlo en otro”.
La Fiscalía de Gante anunció que recurrirá la resolución, por lo que el caso pasará a un tribunal de apelación que deberá convocar una vista en las próximas dos semanas, y tomar una decisión en los 15 días siguientes.
CONTUNDENTE
No se le entrega ni por apología del terrorismo, ni por injurias al rey, ni por amenazas