El Espanyol afronta su visita al Bernabeu con máxima ambición
“Iremos al Bernabeu con fe y ambición y la convicción de jugar un buen partido. Tenemos confianza y saldremos a tope, como siempre, a buscar la victoria”. Marc Roca se hizo eco ayer de lo que desde la tarde del domingo es una tónica general en el vestuario blanquiazul. Tras su victoria ante el Levante en Cornellà, el Espanyol no sólo se desquitó por los puntos perdidos en Mendizorrotza una jornada antes, sino que afronta su visita al feudo del Real Madrid con más confianza y garantías que nunca. Al menos, que en los últimos años, cuando las visitas al Bernabeu se afrontaban con bajas, dudas y escaso espíritu competitivo.
Pese a la victoria de Cornellà de la pasada temporada, lo cierto es que el Espanyol no doblega a los blancos en su estadio desde hace más de dos décadas. Y lo que es plantar cara y competir, desde que Aguirre se sentaba en el banquillo. Fue bajo su dirección cuando los blanquiazules arrancaron su último punto del Bernabeu. Aunque la dinámica de derrotas y falta de competitividad ha sido lo habitual de estos años. Como aquel 5-0 que encajó el equipo de Pochettino o el 6-0 que se llevó el Espanyol de Galca con seis bajas y Arlauskis bajo palos. Antológica es la foto que se hicieron sobre el césped de Chamartín los cinco jugadores del filial con los que se presentó allí propio Pochettino para acabar también perdiendo.
“Pasado el Levante ya trataremos de liarla allí”, señaló esta vez Rubi con la intención de mantener viva la ilusión. “Ellos tienen un calendario complicado y pueden pensar que el partido fácil es el nuestro. Se equivocarían”, señaló Darder.