Radiografía de la empresa catalana: innovadora y abierta al mundo
El año 2017 el número de empresas con sede social en Catalunya creció un 1,5%, llegando a las 618.366
El número de empresas ha crecido durante 2017, consolidando la apuesta por la economía productiva La industria aporta el 21,4% del valor añadido bruto y los servicios el 72,7% (construcción 4,8% y agricultura 1%) El 95,1% son empresas de hasta 9 trabajadores; el 4% tiene de 10 a 49; el 0,7%, de 50 a 199 y el 0,2% más de 200
Una buena manera de conocer la economía de un país es observar cómo son sus empresas. En Catalunya, son casi 620.000 (en 2017 el número de empresas con sede en el país creció por cuarto año consecutivo y lo hizo en un 1,5% hasta las 618.366), con una estructura formada mayoritariamente por pymes. Es una red amplia y diversa con un gran peso industrial, que hacen de Catalunya una economía productiva, que genera puestos de trabajo, conocimiento e innovación.
Cuando se habla de tejido empresarial es una definición explícita en el caso catalán. Los vínculos estrechos en las múltiples y diversas cadenas de valor extendidas a lo largo del territorio, donde también aportan su granito de arena los centros tecnológicos y las universidades, conforman espacios atractivos para el arraigo empresarial.
Así lo han entendido las 8.642 empresas extranjeras en Catalunya, una cifra que ha crecido un 22% durante 2017. Alemania, Francia y Estados Unidos son los países de origen más representados de entre los 89 que han ubicado aquí sus empresas.
TERRITORIO IDÓNEO
Buena parte de estas compañías encuentran en Catalunya un territorio idóneo para desarrollar sus proyectos de innovación y crecimiento. Un objetivo donde juegan un papel destacado los clusters, las concentraciones de empresas, instituciones y agentes relacionados en un entorno cercano que compiten al tiempo que cooperan. Una iniciativa de la que Catalunya es pionera y en la que la Generalitat ha acreditado 28 clusters que ya agrupan más de 2.200 empresas y agentes asociados, con una facturación de más de 74.000 millones de euros.
El crecimiento del tejido empresarial ca- talán se sustenta también en su extensión más allá de las fronteras: las empresas catalanas han superado en 2017 los 70.000 millones de euros, alcanzando un nuevo récord por séptimo año consecutivo. Las responsables de estas cifras son las más de 47.000 empresas capaces de vender en el extranjero, de las cuales 17.000 lo hacen de forma regular (es decir, los últimos cuatro años de manera consecutiva).
El aumento sostenido de las exportaciones tampoco se entendería si no se conjuga con un carácter innovador. Empresas que buscan nuevas soluciones, que son creativas y capaces de sorprender. Combinar la innovación con la internacionalización ha sido la fórmula del éxito. En 2017, un 55,3% de las empresas catalanas realizaron algún tipo de innovación.
CARÁCTER EMPRENDEDOR
La apuesta por la innovación también se traduce en buenos ejemplos de emprendimiento. Según datos de ACCIÓ –la agencia para la competitividad de la empresa, dependiente del Departament d'Empresa i Coneixement– en Catalunya se concentran más de 1.250 startups, buena parte en el entorno de Barcelona, que ya es el 5º hub europeo en número de empresas emergentes.
Los datos sobre las empresas emergentes demuestran la alta cultura emprendedora de los profesionales catalanes. El 36% de fundadores de startups han creado previamente otras empresas. Un rasgo que combina con una alta capacidad de atracción internacional, dado que el 23% de los trabajadores de las startups catalanas son extranjeros, un 14% en el caso de los fundadores.