Animación de culto
Jan Švankmajer asiste hoy en la Filmoteca al homenaje de la Raymond Rousel Society
Poeta, escultor, pintor, marionetista, Jan Švankmajer (Praga, 1934) es ante todo un soberbio cineasta, conocido y admirado en el ámbito del cine de animación, a quien Milos Forman definió con una operación aritmética: “Disney + Buñuel = Švankmajer”. Autor de una obra pegada siempre a la vanguardia –milita vital y estéticamente en el surrealismo–, su filmografía cuenta con títulos de culto como Alice (1988) —tremenda relectura onírica del clásico de Lewis Carroll— y seguramente muchos le recordarán por su participación en la exposición del CCCB Metamorfosis. Visiones fantásticas de Starewitch, Svankmajer y los hermanos Quay, donde también se mostraba parte de su colección de curiosidades.
La Filmoteca de Catalunya proyecta hoy seis cortometrajes, para muchos lo mejor de su obra: Rakvickarna, 1966; Byt, 1968; Jabberwocky, 1971; Moznosto dialogu, 1982; Zamilowané maso, 1988 y Konec Stalinismu v Cecach, 1990. La sesión, a la que asistirá el propio Švankmajer, se enmarca dentro del homenaje que le rinde The Raymond Rousel Society, una organización educativa presidida por el artista visual Joan Bofill Amargós, que será el encargado de presentar el trabajo del cineasta checo junto a dos especialistas en su obra: Joan Marimón y Hermes Salceda. Posteriormente se celebrará una mesa redonda en la que se sumarán el productor de Svankmajer, Jaromír Kallista, y el confundador de la sociedad Raymon Rousel Thor Halvorssen.