La Vanguardia

Monumental repaso al Madrid

El Sevilla pasa por encima de los blancos, que empezaron fatal y no aprovechar­on la derrota del Barça

- CARLOS NOVO

La ristra de trofeos que se trajo el Madrid de la gala de la FIFA de Londres no le sentó nada bien al equipo de Florentino Pérez, que pasó de la alegría de la derrota del Barcelona en Butarque a recibir él mismo un correctivo en Sevilla, el escenario de la Liga española donde más han sufrido los blancos en los últimos años.

La mala estadístic­a en el Pizjuán, donde el Madrid había perdido en cinco de sus últimos seis partidos, no le sirvió de aviso. El Madrid salió a especular, sin ninguna intensidad y se vio superado de cabo a rabo por un equipo que jugó como si le fuera la vida, mucho mejor puesto sobre el campo y determinad­o a ganar. El Madrid no se enteró de nada en la primera parte, encajó tres goles que fueron pocos para los méritos del Sevilla y se retiró al descanso abochornad­o, con la sensación de haber hecho un ridículo histórico, la peor primera mitad del Madrid en muchos años.

La segunda parte fue otra cosa. Con el 3-0 en el zurrón el Sevilla bajó el ritmo y esperó refugiado en su campo. El Madrid lo intentó de todas las maneras, pero Bale no estuvo fino en el remate y una y otra vez el gol se perdió por poco. Y cuando consiguió uno, el VAR lo anuló por apreciar que Modric estaba ligerament­e en fuera de juego. Por primera vez en lo que llevamos de temporada el Madrid acusó de forma clarísima el no tener al que le metía cincuenta goles cada año.

Los sustitutos de Cristiano no funcionaro­n. Bale, por su nulidad ante el gol. Al comienzo del segundo tiempo falló un mano a mano ante Vaclik que hubiera podido meter a los suyos en el partido. Benzema dio auténtica grima, como en los últimos tres partidos en los que lleva siendo una nulidad. Tan mal lo vio Lopetegui que al cuarto de hora del segundo tiempo, con el 3-0 en contra, lo cambió por Mariano, la peor noticia que puede recibir un nueve, que te manden al banquillo cuando tu equipo necesita un buen puñado de goles.

El gran triunfador de la noche fue Pablo Machín, que demostró que le tiene bien tomada la medida al Madrid. Ya le ganó la temporada pasada en Montilivi y anoche supo otra vez maniatar al rival, al que dejó hecho unos zorros. El Sevilla se pegó un auténtico festín. Durante mucho tiempo podrá recrearse en su primera parte, donde consiguió superiorid­ad en todas las zonas. Sus dos laterales adelantado­s fueron un puñal para los visitantes. Su único medio centro, Banega, manejó el tempo del partido a su antojo.

El Madrid sufrió uno de esos cortocircu­itos de los que no sabes cómo salir. Su puesta en escena fue impropia. No le funcionó ninguna línea pero en particular la defensa dio pena. Varane jugó el peor partido que se le recuerda, impreciso y superado en todo momento. Los laterales no existieron. Marcelo ha empezado la temporada en un estado catastrófi­co. Para más desgracia, se lesionó en el segundo tiempo y dejó a su equipo con diez porque los tres cambios ya estaban hechos. Na- cho no estaba para una misión de tanta exigencia. El centro del campo no existió en todo el primer tiempo y la delantera estuvo desasistid­a, con Bale como el único jugador que intentó la guerra por su cuenta con acciones individual­es. El único peligro de los blancos llegó en un tiro lejano del galés que se estrelló en el poste.

El Sevilla sentenció el partido en la primera parte. Ya pudo marcar en el primer minuto en una desatenció­n de la defensa blanca que anticipó de qué iba a ir la noche. André Silva por dos veces, en el 17 y en el 21, y Ben Yedder en el 39 aprovechar­on los errores groseros de la zaga visitante.

El Madrid comenzó el segundo tiempo necesitado de una proeza que enseguida se vio que no iba a conseguir. Primero, porque no la mereció de ningún modo; segundo, porque estaba gafado, con el punto de mira desviado, sin recursos individual­es ni colectivos en una noche en la que no le salía nada. La entrada de Mariano y Lucas Vázquez sirvió de poco. El balón era ya del Madrid, pero el Sevilla tenía más peligro en las contras. Courtois hizo un par de paradas de mérito que evitaron que la sangría fuera aún mayor. La derrota se consumó y el Madrid sigue sin ofrecer buenas sensacione­s en la Liga ante equipos serios. El sábado le espera el derbi.

PÉSIMA DEFENSA Courtois fue el mejor de una zaga donde Varane y Ramos completaro­n un partido lamentable

LA LESIÓN

El Madrid acabó con diez jugadores porque Marcelo se lesionó con los tres cambios ya realizados

 ?? MIGUEL MORENATTI / AP ?? Andre Silva, figura del partido, celebra uno de sus dos goles ante la impotencia de Courtois
MIGUEL MORENATTI / AP Andre Silva, figura del partido, celebra uno de sus dos goles ante la impotencia de Courtois

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