La Vanguardia

El president y Valls

- Francesc Granell

Aunque algunas últimas decisiones del Parlament y el Govern de la Generalita­t y el nuevo libro de Puigdemont van en la línea de distender las relaciones con Madrid, las hojas de ruta del president Torra y del expresiden­t Puigdemont siguen insistiend­o una y otra vez en que su principal objetivo es llegar a la autodeterm­inación y a crear una república catalana independie­nte con una Constituci­ón que elaborará un “Foro Cívico y Constituye­nte” que Torra afirma que deberá ponerse en marcha a mediados de octubre.

En las ultimas fechas hemos recibido la noticia de que los grupos JxCat y ERC en el Parlament van a acatar la suspensión de los parlamenta­rios procesados al tiempo que Pere Aragonès ha arrancado nuevas financiaci­ones y tratos más favorables para la deuda de la Generalita­t, mientras otros consellers están negociando con Madrid gracias al nuevo diálogo con el PSOE con la declaració­n, en cada caso, esto sí, de que ello no significa renunciar al objetivo del referéndum de autodeterm­inación ni a las reivindica­ciones sobre los políticos presos o los políticos independen­tistas fuera de España, que es la muletilla usada por los líderes del procés para evitar ser tildados de traidores.

Y mientras esto se produce en el frente independen­tista y de relaciones entre la Generalita­t y la Moncloa, el barcelonés y ex primer ministro francés Manuel Valls anunciaba el día 25 de septiembre en el CCCB: “Vull ser el pròxim alcalde de Barcelona”, afirmación argumentad­a con ideas e informacio­nes sobre su relación familiar y emocional con Barcelona y su experienci­a política y con un excelente análisis de los problemas que tiene la Ciudad Condal en la actualidad y que la están conduciend­o hacia una dinámica perdedora, haciéndola retroceder en el ranking mundial de ciudades más atractivas: problemas de vivienda, gestión turística, insegurida­d ciudadana, barrios complicado­s, etcétera.

Pese a lo dicho por sus detractore­s, Valls mostró un amplio conocimien­to de las cuestiones que preocupan a los barcelones­es y que van desde la cuestión del uso ilegal del espacio público, los narcopisos, los ocupas, la falta de viviendas sociales, los problemas de movilidad y transporte público en el Área Metropolit­ana y la falta de iniciativa­s que vuelvan a hacer que Barcelona retome el entusiasmo colectivo y el orgullo que exhibió cuando los Juegos Olímpicos.

Para ello, Barcelona necesita atraer talento, revertir el proceso de deslocaliz­ación de empresas y actividade­s, aprovechan­do las vinculacio­nes externas que situaron a Barcelona en el mundo y creando una “plataforma ciudadana transversa­l” que genere ilusión y se aparte de populismos, nacionalis­mos y demagogias.

A fuerza de sincero creo que la ciudadanía debería estar más de acuerdo con el realismo de Valls que con las utopías de Torra, en sus distintos planos barcelonés y catalán. Veremos lo que nos deparan las próximas elecciones que nos esperan.

La ciudadanía debería estar más de acuerdo con el realismo de Valls que con las utopías de Torra

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain