La Vanguardia

Viñas verdes en París

- ÓSCAR CABALLERO

París, primer destino turístico urbano del mundo –33 millones de entradas hoteleras en el 2017– tiene su meca en un distrito legendario, Montmartre, con sus diez millones de visitantes, el preferido de uno de cada tres turistas de París, que además convierten al Sacré Coeur en el segundo sitio más frecuentad­o de la capital, detrás de la torre Eiffel. Apogeo esta semana, hasta el domingo: convocados por la fiesta de las Vendanges (vendimias) de Montmartre, medio millón de personas invaden los ocho barrios del distrito.

La enoclofobi­a, el miedo a las muchedumbr­es, es una contraindi­cación: es fácil no poder dar ni un paso cuando las cofradías coinciden con fanfarrias, terrazas colmadas, deambulaci­ones de curiosos que suben y bajan los 2.280 peldaños de sus calles (la colina culmina a 130 metros), entre una gran coral de 700 estudiante­s,150puestos­enlos1.000m2 delParcour­sdu Goût (recorrido del sabor). Y un gran desfile, con 1.400 participan­tes el año pasado, cuando un Baile Dalida –la musa egipcia que allí se suicidó–, reunió a más de 2.000 bailones.

La fiesta de las Vendanges nació en 1934 –Mistinguet­t, madrina; Fernandel, padrino– y celebra su 85º edición. Para vendimiar hace falta un viñedo. Montmartre lo tiene desde 1933, cuando los vecinos plantaron 1.726 pies de viña para frustrar un proyecto inmobiliar­io. En ese sentido, murmura Alain Coquard, presidente de la República de Montmartre, el actual enemigo es Airbnb. Si Montmartre es el distrito 18 de París, ligado administra­tivamente a la capital desde 1859, sus habitantes se declararon república –en un bistrot– en los 1920. La esposa del presidente es ministra de agricultur­a –se ocupa de viña y muguete, esa flor que se regala en Francia cada 1 de mayo–, pero cada ciudadano mima los monumentos. O sea, el Sacré Coeur, el cementerio (la muy visitada tumba de Dalila eclipsa las de Berlioz, el chef Carême, Madame Récamier, Stendhal, François Truffaut o RoseAlphon­sine Plessis, la verdadera Dama de las Camelias) y los 1.556m2 de viñedo. Sin olvidar el museo de Montmartre, el cabaret Michou –Michel Catty, creador de este eco de la Bodega Bohemia es ministre de la nuit–, el Moulin de la Galette donde se alzaba un baile pintado por Renoir, Van Gogh, Picasso, ToulouseLa­utrec. O ese bar público pero escondido, Bar à Bulles, que permite beber una copa de champán sobre el Moulin Rouge y los apartament­osmuseo de Boris Vian y Jacques Prévert.

El tema de este año: la paz, por los cien años del final de la Primera Guerra Mundial, que dejó Montmartre con más viudas y huérfanos que varones. Se brindará con la Cuvée Montmartre fête la paix 2017. La típica botella de 50 cl (contra los 75cl de las habituales) cuesta 30 € (rosé) y 40 € (tinto).

Desde el 2014 Sylviane Leplâtre, de Montpellie­r, enóloga de París, cultiva la viña con productos orgánicos. Y vinifica, sin sulfitos, en la prensa y cuba del sótano del ayuntamien­to. Durante las fiestas el comité de fiestas y acciones sociales vende el vino en la plaza Jean Marais –otro vecino histórico– a beneficio de, por ejemplo, la comida navideña de los ancianos. De postre, cancán del Moulin Rouge. La fiesta se declara ecorrespon­sable: el año pasado economizó 300 kilos de desechos gracias a copas reutilizab­les, 60.000 litros diarios de agua por los llamados servicios secos, 3.500 kilos de abono derivados de tales medidas y otro tanto de vidrio recuperado. El broche lo pone una multitud de parejas, en la plaza Louise Michel, discoteca al aire libre. Le Bal de la Paix incluye homenaje a Martin Luther King, con proyección de su discurso emblemátic­o (I have a dream) en el cincuenten­ario de su muerte.

En fin, si no vas a la montaña, el monte viene a ti: el jueves 18, en Barcelona, CaixaForum inaugura Toulouse-Lautrec y el espíritu de Montmartre, una exposición sobre el París de fines del siglo XIX y principios del XX. Bajo su disfraz de bohemio, Toulouse-Lautrec fue un obrero del arte. A pesar de morir con sólo 36 años dejó 737 óleos, 275 acuarelas, 369 litografía­s y 5.000 dibujos, la mayor parte innovadore­s. En la exposición lo acompañan contemporá­neos que también pintaron Montmartre: Paul Signac y Pierre Bonnard.

París convierte en una atracción turística la vendimia del viñedo de Montmartre

Los vecinos de Montmartre plantaron las cepas en 1933 para frustrar un plan inmobiliar­io

 ?? GONZALO FUENTES / REUTERS ?? Madura. Imagen de la viña de Clos Montmartre tomada este miércoles. La uva (ver detalle abajo) está ya listapara ser recogida
GONZALO FUENTES / REUTERS Madura. Imagen de la viña de Clos Montmartre tomada este miércoles. La uva (ver detalle abajo) está ya listapara ser recogida
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain