Colau quiere resucitar la multiconsulta, aunque sin tiempo para celebrarla
El pleno del día 10 de abril supuso uno de los grandes fracasos del gobierno de la alcaldesa Ada Colau: quedó enterrada la macroconsulta, que ya llegó descafeinada, dado que tan sólo se planteaba dos cuestiones, la municipalización del servicio de agua y el cambio de nombre de la plaza Antonio López y López. Una dolorosa espina que el ejecutivo local se quiere quitar en el pleno de la semana que viene votando un recurso de reposición que avalará, o no, que se pregunte a la ciudadanía por los asuntos de la multiconsulta. Según aseguran desde el equipo de gobierno, será la resurrección de una de sus medidas estrella porque nadie puede votar en contra.
“Entendemos que está en juego la soberanía de la ciudad, la Carta Municipal”, manifestó la concejal de Participación, Gala Pin, durante una sesión de trabajo con periodistas en la que estuvo acompañada por el teniente de alcalde de su área, Jaume Asens. Según Pin, con este quiebro –la votación del recurso de reposición– se le da vida al proyecto y, de alguna manera, se blinda porque si se aprueba el recurso en el pleno, a su juicio y el de los servicios jurídicos municipales, se avala también la iniciativa. “Lo que se votará (en pleno) es si se estima el recurso y el recurso lo que hace es dar valor a la multiconsulta y al informe jurídico”, insistió Pin. Según Asens, los grupos tan sólo pueden o votar a favor o abstenerse. La clave de que la resucitación sea viable para el gobierno de la alcaldesa Ada Colau, apoyándose en un informe jurídico, es que en el pleno del día 10 abril los grupos municipales no podían votar en contra por razones políticas y sólo podían denegar las preguntas por motivos jurídicos. Igual que el viernes de la semana que viene. “Es el momento de que los partidos que votaron en contra vuelvan a la legalidad”, manifestó Asens, que señaló que los partidos que voten en contra en el próximo pleno también estarán votando en contra de los servicios municipales.
Pase lo que pase, de lo que no hay dudas es que, aunque se apruebe el recurso de reposición y la tesis del gobierno Colau sea correctas, ya no habrá tiempo para llevar a cabo la multiconsulta durante este mandato, dado que a partir del 26 de noviembre el Ayuntamiento no puede llevar a cabo ninguna consulta (lo prohíbe la ley electoral: faltarán menos de seis meses para las elecciones municipales). “En tres semanas no podemos organizar algo así, pero se asegura que se pueda hacer en un nuevo mandato”, manifestó Pin, quien señaló que la aprobación del recurso de reposición también obliga al alcalde del próximo mandato, sea quien sea, a que la convoque y celebre. Eso sí, el nuevo edil tendría que hacer un decreto de alcaldía para reactivar la celebración de la multiconsulta. Dispondría de dos meses para hacerlo y, si no lo hiciera, las entidades promotoras del proceso participativo podrían demandar a la administración por inactividad. “Tan sólo no se haría la multiconsulta si las entidades retirasen las propuestas”, explicó la concejal Pin. Si los grupos votan en contra y de nuevo no sale adelante la iniciativa, las entidades impulsoras tendrán la posibilidad de ir por vía judicial.
El recurso de reposición se abordará antes en comisión municipal este miércoles. En el pleno del 10 de abril las preguntas de la multiconsulta sólo recibieron el apoyo de BComú y de ERC, mientras que el resto de grupos municipales votaron en contra.
El ejecutivo llevará al pleno un recurso con el que quiere blindar la medida de cara al próximo mandato