Casado buscará pactos con Cs y PSC en los ayuntamientos
Fernández presidirá el PPC con el aval de los pesos pesados
Pablo Casado pretende que los partidos constitucionalistas, es decir, Partido Popular, Ciudadanos y espera que también el PSC –“a ver cómo se porta”–, hagan un frente común de cara a las elecciones municipales, de forma que puedan evitar que las ciudades más importantes de Catalunya caigan en manos independentistas.
Aun así, el presidente del PP dejó ayer claro, durante un desayuno informativo organizado por Europa Press, que su partido no se va a integrar en la plataforma transversal de Manuel Valls, entre otras cosas porque el ex primer ministro francés se ha presentado como un “socialista y progresista”. En Barcelona, cree el líder popular, está convencido de que “hay muchos votantes que no se sienten socialistas ni progresistas de izquierda”.
A ese electorado dirigirá el PP su candidatura a las municipales, que aún no se sabe quién encabezará, con un proyecto “liberal-conservador que sea mascarón de proa contra el independentismo”. Aunque el PP presente candidatura propia, Casado tiene claro que si Valls queda por delante en las elecciones municipales, podrá contar con los votos del PP, y espera que con los del PSC, para que en Barcelona haya un gobierno constitucionalista. Su petición se amplía a otras ciudades de Catalunya, en especial del área metropolitana, donde ya sea el PSC, Ciudadanos o el PP (en Badalona y Castelldefels) podrían gobernar con el apoyo de los otros dos partidos las dos terceras partes de la sociedad catalana, “rompiendo la quimera independentista”.
Mientras tanto, Alejandro Fernández se perfila ya como nuevo presidente del PP catalán en sustitución a Xavier García Albiol, que regresará a Badalona para intentar recuperar la alcaldía. Con el apoyo mayoritario entre la militancia del PPC, y el más que simbólico plácet de Casado tras ser decisivo en su victoria en Catalunya en las primarias, Fernández ha recabado el apoyo de los principales dirigentes de la formación en Catalunya y ayer presentó 1.740 avales, pese a que los mínimos requeridos eran 90.
Este gestó de fuerza evitó que en el cierre del plazo ayer al mediodía ningún otro dirigente presentara una candidatura alternativa. De esta forma, Fernández se garantiza la elección como presidente del partido en el congreso del 10 de noviembre. El actual portavoz parlamentario del PP ha conseguido los avales de Jorge Fernández, Dolors Montserrat, Alberto Fernández, Andrea Levy, Enric Millo, Santi Rodríguez, Enric Millo y Manu Reyes, entre otros dirigentes de peso.
Ninguno de los sectores y familias que existen en el PPC, en otras épocas enemistados, querían en estos momentos, a las puertas de unas municipales en el mes de mayo que se antojan decisivas, abrir una guerra interna. “Ha primado la idea de consenso a las posibles discrepancias estratégicas e ideológicas”, destaca un dirigente del PP. “Toca confeccionar nuevos equipos para relanzar el partido con ciertas garantías”, apunta otro.
El líder popular cree que si los constitucionalistas gobiernan a dos tercios de catalanes, “la quimera independentista” cae