El Barça barre al Füchse y conquista su 4.º Mundial
Los 4.857 km y 7 horas de vuelo entre Doha y Barcelona son menos paliza si se regresa con un título bajo el brazo. Un Mundial de Clubs (o la IHF Super Globe, en su denominación oficial) y el cheque de 400.000 dólares que se embolsa el campeón son suficiente premio para compensar el periplo de 11.000 km y cuatro partidos en 7 días que se ha comido el Barça Lassa, de nuevo oficiosamente rey del mundo. Porque es lo que logró ayer en Qatar, aunque algunos lo minimicen con un diminutivo: coronarse por cuarta vez (en seis años) mejor equipo del planeta, al vencer en semifinales al campeón de Europa, y en la final, al campeón de la EHF, en un torneo con los campeones de Asia, África, América y Oceanía.
El Füchse Berlin, 5.º clasificado de la competitiva Bundesliga y repetidor en la final de Doha (el año anterior, 29-25 para los blaugrana), ponía a prueba la solidez y el hambre de un equipo blaugrana que empieza a coger velocidad de crucero, a acercarse al ideal de Xavi Pascual. A la hora de la verdad, los zorros de Berlín le duraron poco a la máquina blaugrana: apenas media parte, el tiempo que necesitó el Barça para imponer su juego y su amplitud y calidad de banquillo.
Es lo que tiene este nuevo Barça, que prácticamente juega con dos equipos, que mantiene la calidad y la intensidad con la rotación de sus piezas sin bajar el pistón. Y los rivales, si no tienen fondo de armario, acaban pagando el desgaste. Es lo que le sucedió al Füchse, que se fundió tras el descanso (12-13). Sostenido sobre todo por el jugón Jacob Holm, el conjunto alemán impidió al Barça imprimir su juego veloz y llevó la iniciativa durante los primeros 20 minutos (9-8, su última ventaja).
A partir de ahí, el Barça dio un cambio de ritmo que rompió el partido. Pasqui hizo entrar a Entrerríos, Sorhaindo y Mem, que se unían a Mortensen, Aleix y Lasse, recién incorporados, y con una cara B totalmente nueva inició el despegue con velocidad, a la vez que Möller comenzaba su festival en la portería con 8 paradas a los 25m. El Barça se fue de 2 (9-11, 1113) y afrontó el segundo tiempo con una marcha más.
En la reanudación, un 0-7 descomunal en 7 minutos, con cuatro
UN TRIUNFO CORAL
Tomàs lideró (5 goles) un ataque colectivo en el que marcaron los 14 de campo y Möller aportó 15 paradas
goles de Víctor Tomàs, dejó clavado al Füchse (15-22), que se vio 8 abajo (16-24) a falta de 15m. Lo que le sobró al Barça para saborear su tercer título del curso: 3 de 3.
Barça Lassa: Möller, V. Tomàs (5), Dolenec (3), Pálmarsson (2), N’Guessan (1), Ariño (1), Fàbregas (2); Mortensen (4), Entrerríos (1), Sorhaindo (1), Andersson (2), Aleix (2), Petrus (2), Mem (2), Duarte (1).