“He sido feliz sirviendo a los demás”

El crematorio que celebró la despedida de Isa Solá está situado junto al hospital Pediátrico de Saint Damien, en Tabarre. El padre Rick Frechette lo fundó tras el terremoto de Haití del 2010 para dar un funeral digno a miles de cuerpos sin nombre. En este crematorio se han incinerado a ocho de sus colaboradores en los tres últimos años, asesinados por ladrones. En lugares de extrema pobreza, los misioneros son un objetivo fácil. Pero ahí están, valientes y generosos. La autora Mey Zamora explica que hay una denominación común en todas las misiones. “Combaten a diario en lugares muy pobres, comen poco, duermen poco y, a pesar de ello, despliegan mucha energía”. Cuenta que trabajan de sol a sol, generalmente en sanidad o educación, no rehúyen ninguna emergencia y emprenden proyectos que consiguen poner en marcha, casi siempre, de formas rocambolescas debido a la falta de dinero. Sus casas son un ir y venir continuo de gente que pide. Y atienden a todos los que tienen necesidad, económica o de consuelo. “Isa lo ejemplifica bien: en su rato libre, dona sangre”. Después del terremoto, la religiosa escribe tras una visita al hospital en la que los pacientes agradecen sus cuidados a pesar de ser dolorosos: “¿Quién cura a quién? ¿Quién nos puede dar lo que nos falta?” La obra que Zamora presentará hoy en la Casa del Llibre es un homenaje a todos los misioneros. “Espero irme haciendo, al menos, lo que amaba hacer: entregando mi vida, amando a mi gente, sirviendo. Si es así, celebrarlo, todo está bien. He sido feliz y he estado donde más he querido siempre, en África y luego en Haití”, dice Isa. Ahora conocemos a la misionera tras su repentina desaparición. Pero ¿qué sabíamos de ella antes? ¿Qué sabemos de Carmen Samaranch, Rosa Ros, Maria Viader, Maite Valls, Alberta María Gil, Carmen Colomer, Pilar Vila San Juan, Roser Vila, Yudith Pereira, Marie Puy Montaner, Leide Philocles, Viviane Patenade, Luz Mari Arribas o M.ªAngeles Aliño? La autora dice que son como luces en el planeta. Brillan, es cierto, pero en completa discreción.