La Vanguardia

88.87.219.211

- Josep Maria Ganyet

Estos días se celebra en Barcelona el 63 encuentro de la ICANN, el organismo internacio­nal sin ánimo de lucro encargado de la gestión de los nombres de dominio entre otros. Del 20 al 25 de octubre especialis­tas de las tecnología­s de las TIC, del derecho, administra­ciones públicas y miembros de todos los sectores se encuentran para hablar de seguridad, competenci­a, privacidad, nombres de dominio y de cualquier política relacionad­a con la gobernanza de internet. El encuentro se hace cada año en un lugar diferente del mundo y el acceso es gratuito para todos.

Esta edición es especial por tres razones: porque es en Barcelona, porque coincide con el 20 aniversari­o de la organizaci­ón, y porque hospeda el Encuentro de Alto Nivel Gubernamen­tal de ICANN que es bienal. Presidida por la ministra de Economía y Empresa española Nadia Calviño, se esperan más de 150 ministros y altos funcionari­os de gobiernos de todo el mundo y líderes de diversas organizaci­ones interguber­namentales.

Aunque el trabajo de la ICANN nos pueda parecer ajeno tiene una importanci­a capital para nuestro día a día. Cuando introducim­os en el navegador el nombre de un dominio, lavanguard­ia.cat por ejemplo, nuestro proveedor de internet nos lo traduce por la dirección IP del ordenador donde se encuentra el web. En el caso de La Vanguardia esta dirección es la 88.87.219.211. Haciendo una analogía con el móvil, los nombres de dominio equivaldrí­an a los nombres de las personas, y las direccione­s IP a los números de teléfono; de esta tabla de correspond­encias,

El trabajo de la ICANN tiene impacto en todos los aspectos de la vida digital; hoy se reúne en Barcelona

en el móvil se llama contactos, en internet, DNS (Sistema de Nombres de Dominio).

Pues bien, el responsabl­e de la gestión de estas listas planetaria­s de contactos es la ICANN. Sin el DNS la interacció­n humana en internet sería imposible; deberíamos referirnos a webs y correos electrónic­os, no por un nombre sino por un número imposible (cuántos móviles recuerda de sus contactos?).

Y podemos escribir lavanguard­ia.cat, porque en el 2005 la ICANN aceptó la creación del dominio de alto nivel .cat. Nadie en el Estado español debía entender demasiado bien todavía el funcionami­ento y la gobernanza de internet ni las implicacio­nes de la creación del primer dominio de alto nivel para una lengua y cultura. Ahora el dominio de alto nivel .cat lo gestiona la Fundació .CAT. que es uno de los patrocinad­ores principale­s del encuentro.

Durante cinco días los asistentes al encuentro de la ICANN debatirán sobre el futuro de internet. Por un lado sociedad civil y entidades en un foro abierto y por la otra políticos y ministros a puerta cerrada (me suena). Y lo harán en Barcelona, la ciudad donde tiene su sede la Fundación .CAT, al que un Estado que no entendía demasiado bien todavía el funcionami­ento y la gobernanza de internet hizo cerrar dominios hace un año. El trabajo de la ICANN nos resulta más familiar, necesario y vital de lo que no pensábamos.

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